López Obrador quiere consolidar su movimiento nacional

Los problemas de seguridad y de violencia no se van a enfrentar con policías militares y amenazas de mano dura, expresó el autonombrado presidente legítimo de México Andrés Manuel López Obrador, al presidir una asamblea regional de evaluación.
Entrevistado por los reporteros antes de reunirse en Zihuatanejo con líderes perredistas de la costa grande, López Obrador declaró que la violencia se tiene que atender de fondo, porque la inseguridad y la violencia lleva ya mas de 28 años vigente porque no hay crecimiento en la economía y sin empleos y con una política económica que solo beneficia a una minoría.
En la llamada asamblea regional de evaluación, López Obrador estuvo acompañado por el senador Lázaro Mazón Alonso y Armando Ríos Piter, ambos aspirantes a gobernar Guerrero, López Obrador subrayó que la minoría a que se refiere son unos treinta empresarios de México que tienen sometida a la mayoría del pueblo de México.
Mencionó que esto es el resultado de un fruto podrido de esa política que trae inseguridad y violencia y que es importante que bajen los salarios de todos los funcionarios del país para acabar con los privilegios, porque le cuesta muchos millones de pesos al pueblo mantener al gobierno.
De su llamado movimiento nacional que encabeza, mencionó que lo va a reorganizar muy bien y “ya estamos en proceso de ello, por lo que vamos a consolidad bien el movimiento cuyo objetivo es la transformación de México, pero de manera pacífica”.
Asimismo rechazó que personalmente apoye las campañas a gobernador de los aspirantes de Guerrero, “porque yo tengo la encomienda de un movimiento popular”, y que él sigue siendo perredista, “ahora tengo licencia porque estoy dedicado a la organización de este movimiento, porque de no haber un verdadero cambio, las cosas no van a mejorar en México”, acotó.