FORO POLITICO

Por Salomón García Gálvez

MANUEL NAVA, Y SU DIFÍCIL TAREA
Nada fácil ha sido la labor desempeñada por el director de Comunicación Social del gobierno estatal, Manuel Nava García, quien además de difundir la obra de la administración estatal, debe salir al paso para defender a su jefe, el gobernador Zeferino Torreblanca Galindo, ante el alud de ataques y señalamientos de que es objeto en ciertos medios -principalmente El Sur- luego del proditorio asesinato del diputado perredista Armando Chavarría Barrera.
Es los tiempos actuales, es sumamente difícil desempeñar el papel de jefe de prensa de un gobierno estatal, en circunstancias y hechos nada agradables como el crimen perpetrado contra quien fuera el líder del Congreso Local, Chavarría Barrera; sin embargo, Nava García cumple fielmente su papel institucional: dar la cara y salir al paso ante la crónica y radical campaña de desprestigio de que es objeto el mandatario Torreblanca Galindo.
“Al asesinato perpetrado contra el diputado Armando Chavarría Barrera, no se le puede dar solución a partir de presiones ni ambiciones políticas de quienes han lucrado con este crimen”, respondió el jefe de prensa del gobierno estatal en referencia a la publicación de un libro escrito por el periodista Tomás Tenorio Galindo y la difusión que se hace de éste el diario El Sur.
Nava García lamentó que dentro del gremio periodístico existan comunicadores que se han olvidado de hacer periodismo para hacer militancia partidista.
Esto es, en respuesta a los ataques que ha recibido Torreblanca Galindo, donde se manejan hipótesis sobre su probable responsabilidad en el asesinato de Chavarría Barrera. En términos jurídicos, y de acuerdo con la actual legislación, esto quiere decir que Zeferino es inocente, mientras no se demuestre lo contrario.
Dijo que cuando se hacen ese tipo de afirmaciones, deben estar sustentadas en argumentos y no caer en irresponsabilidades o difamaciones.
“No se pueden dar soluciones a partir de presiones ni ambiciones políticas de quienes han lucrado con el asesinato de Chavarría Barrera para generar falsos liderazgos”.
“Hay quienes siguen empeñados en ejercer liderazgos a partir del control político y electorero. Es una lástima que la izquierda, que se jacta de autenticidad, esté repitiendo esquemas que se utilizaban en el pasado”, reviró Nava García, en sólida defensa de su jefe Torreblanca Galindo quien se ha convertido en blanco directo de los auto llamados “izquierdistas” y detractores.
LA GUERRA SUCIA Y SUS ACTORES
Extraviado y a la vez anclado en la desfasada izquierda tradicional, el ex diputado federal perredista Cuauhtémoc Sandoval Ramírez, casi vive su ocaso como político que ha disfrutado -y demasiado- las mieles del poder y el fuero constitucional pero sin ninguna posibilidad de ser candidato a la gubernatura de Guerrero. ¿Quién o quiénes le metieron esa absurda idea en la cabeza?
Diversos cuadros políticos perredistas -actualizados en la ciencia política- aseveran que su colega Sandoval Ramírez anda fuera de contexto y que no tendría la más mínima posibilidad de ser tomado en cuenta por alguna empresa cuando realice alguna encuesta para ver el posicionamiento real de cada uno de los aspirantes a la candidatura a gobernador del estado de Guerrero.
Cuauhtémoc, menos ganaría ninguna elección interna en urnas, si es que el PRD se decide por ese método para elegir a su candidato a la gubernatura de Guerrero, como son sus calenturientas y exóticas aspiraciones de este vividor de la izquierda, que le fue muy bien como ex diputado federal pues era uno de los que más dinero cobraron en la Cámara de Diputados, por concepto de medicamentos y atenciones médicas especializadas. Una cantidad cercana al medio millón de pesos se llevó a los bolsillos.
Destacados cuadros políticos del PRD, señalan que Sandoval Ramírez, es muy perverso y proclive a emprender la guerra sucia en contra de quienes supone son sus enemigos políticos, para desacreditarlos. Tira la piedra y esconde la mano.
Amarillos o tricolores, da lo mismo para Cuauhtémoc: Temeraria y cobardemente los difama a través de la infinita red de internet mediante correos electrónicos. Los Jakers ya lo tienen bien ubicado como presunto remitente de la guerra sucia muy de moda en estos tiempos pre-electoreros.
Aún no se ha legislado en Guerrero sobre esta materia -delitos cibernéticos-, porque de ser así, Sandoval Ramírez ya enfrentaría demandas ante autoridades competentes. ¿Pretende Cuauhtémoc, negociar su esmirriado capital político? ¿Con que partido? ¿Con el PRI, o con cuál PRD?... Punto.
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