APUNTES DE UN VIEJO LÉPERO

Por Jeremías Marquines

Cambio de piel

El candidato del PRI, Manuel Añorve Baños lucha de manera desesperada por reducir el amplio margen que lo separa del candidato de la Coalición Guerrero nos Une, Ángel Aguirre Rivero, integrada por los partido políticos PRD, PT y Convergencia, y que lo ubica como la opción perdedora.
Y es que de acuerdo a las mediciones de la preferencia electoral de los guerrerenses recogidas la última semana por el PRI, Ángel Aguirre subió de siete, a trece puntos en la preferencia por candidato. Estos resultados han generado un cisma de desesperación en el equipo añorvista que se vio obligado a replantear su estrategia y hacerla más agresiva con la intención de provocar el mayor daño a la coalición de izquierda y desalentar el voto ciudadano que representa el capital de Aguirre.
En la última semana, el discurso del candidato apoyado por los caciques priístas René Juárez y Rubén Figueroa, cambió drásticamente. Tras mantener un perfil que pretendía apoyarse y usar la “buena relación” con el fallido gobernador Zeferino Torreblanca,  Añorve dio un giro y ahora pretende parecer crítico del zeferinato.
Añorve pasó de gritar: “Viva zeferino” a declarar que “el de Zeferino es un gobierno fallido y de promesas incumplidas”. El cambio de disfraz no fue difícil para un camaleonazo como Añorve. Sin embargo, no debe creerse que esta mutación se debe a alguna desavenencia con el gobernador, por lo contrario, es un cambio de discurso planeado y concertado. Zeferino sigue firme en el acuerdo con los caciques y mantiene su apoyo a Añorve a través de funcionarios del gobierno estatal y de gente como Gloria Sierra, Donoso, Abelina López, y los riospiteristas susceptibles al soborno tricolor.
Lo que ocurre en realidad con este giro discursivo, es que a don Manuel no le dio resultado la estratagema de mimetizarse con el zeferinismo. En un principio pensó en usar el discurso de la continuidad del gobierno a su favor pero más adelante se dio cuenta que las mediciones ponen en el suelo y reprueban el mediocre gobierno estatal. Percibió que en lugar de sumar, zeferino le estaba restando popularidad. A esto hay que agregar que el gobernador contuvo su diarrea declarativa contra el perredismo y en esas condiciones ya no le es útil al añorvismo.
Así que, como aparentemente ya no le sirve, Añorve decidió lanzarse contra el gobierno estatal pensando que de esa manera afectaría a la Coalición aguirrista. Lo que no previó es que la gente no asocia a Ángel Aguirre con las acciones de gobierno de zeferino, y tampoco al PRD, pues Torreblanca Galindo se encargó durante los últimos seis años de deslindar a “su” gobierno del PRD. En lugar de colgarse del zeferinismo, Aguirre vende sus propias acciones de gobierno, que no son pocas, y que hizo siendo gobernador interino y senador.
Como no tiene nada bueno que vender, Añorve continúa su carrera hacia el pantano. Creído en que la guerra sucia y la denostación harán que la gente deje de apoyar a Ángel Aguirre, don Manuel desató su incontinencia verbal a la que agregó una buena dosis de violencia.
El desequilibrio y la baja en la campaña del priísta, se evidencia también en la intensificación de las giras por las colonias de Acapulco, un municipio que reprueba su efímero trabajo como alcalde y donde la intención del voto favorece a Aguirre.
Lo que pasa con el señor Baños es que no puede convencer; sus propuestas son vacías, tramposas y no tiene resultados tangibles que ofertar. En un acto desesperado, está presionando para que se termine cuanto antes el llamado puente bicentenario, un proyecto sin ninguna utilidad donde el gobierno municipal se gastó casi 200 millones de pesos para una obra que a todas luces vale menos, es deficiente y que a la larga podría derivar en una tragedia.
Pero más allá de una obra deficiente, lo que la gente de Acapulco no le perdona es que haya abandonado la tarea de gobernar para irse de pinta en busca de la gubernatura. Las dos veces que ha sido alcalde de Acapulco don Manuel ha dejado tirado el changarro y, además, en pésimas condiciones.
Así que como no puede ganar, la única estrategia que le queda es la de arrebatar. Es por eso que, más que trabajar para crecer y convencer, Añorve lo que busca es confundir para reducir el margen de distancia. Una acción propia de candidatos que van a la baja y que ven difícil remontar las estadísticas. De allí que, en adelante, lo que veremos será la intensificación de la guerra sucia, las presiones, los manotazos, los insultos, y la compra de liderazgos de medio pelo. Sumado por supuesto, a la desestabilización social como inhibidor del voto de la sociedad civil.
Por su parte, la Coalición Guerrero nos Une debería de preocuparse más en consolidar y ampliar el margen logrado. Tiene necesariamente que corregir una serie de errores que vienen cometiendo, así como perfeccionar el discurso del candidato y agregar nuevas propuestas porque ya tiende a ser repetitivo. Entre estos errores, está el hecho de que el candidato es acompañado en sus giras por muchos “amigos de Ángel” y hay ausencia de cuadros importantes de los partidos coaligados. Además no debe pasarse por alto darle su lugar y mencionar siempre a regidores y cuadros destacados tanto del PT y de Convergencia que asisten a los actos de campaña como el que tuvo efecto en la colonia del PRD en Chilpancingo, y moderar la presentación de viejos líderes priístas que, si bien, son “amigos”, algunos traen malos recuerdos y la gente no los percibe bien. Por otra parte, insisto, el candidato tiene que vender más proyección de futuro y menos logros del pasado, es hora de que aparezcan las nuevas propuestas; es hora de que se diga qué se va hacer para mejorar la seguridad pública, cuál es el plan para darle certeza a los ciudadanos en materia de seguridad y procuración de justicia.
En resumen, estos detalles son, si se quiere, pequeños pero que sumado van haciendo errores grandes. Si la idea es vender un gobierno distinto y al servicio del pueblo, entonces se tiene que ser congruentes en el decir y el hacer desde ahora. La coordinación general de la campaña aguirrista, si es que hay una, debe comenzar por poner orden y seleccionar al equipo que acompaña al candidato para lograr mejor desempeño, y menos molestias por actitudes ofensivas que puedan percibir los ciudadanos que asisten a sus actos de campaña. Hay un exceso de personal que, muchos de ellos, sólo quieren que los vean cerca del candidato para sentirse importantes pero en realidad no hacen nada. La dirección general debe cuidar esos detalles como por ejemplo que los presentadores sean gente de los partidos coaligados porque son ellos los que conocen a los líderes y bases de apoyo de los lugares donde se presenta el candidato y además, son quienes mejor hablan el idioma de la izquierda progresista. Ahí queda eso.

3 comentarios:

  1. BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, ANORVE GANARA.

    BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, BLA, ANORVE PROXIMO GOBERNADOR DE GUERRERO!!!

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  2. aunque te duela va ganar anguel aguirre el mejor candidato

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  3. EL PENDEJO ANONIMO DEL BLA,BLA,BLA,
    NO TIENE NADA QUE ESCRIBIR, SU CEREBRO NO LE DA PARA MAS, SIMPLEMENTE ANDAR DE PORRISTA DEL "DOCTOR" MANUEL AÑORVE.
    ¿ ALGUIEN ME PODRIA DECIR DONDE HA EJERCIDO SU PROFESION DE DOCTOR ABOGADO EL CHUQUY AÑORVE ?
    HASTA DONDE SE ES UN POLITICO QUE SE ESCUDA EN LAS FALDAS DE BETY PAREDES Y SE APOYA DEL CACIQUE FIGUEROA, Y SIEMPRE DEJA SUS RESPONSABILIDADES A MEDIAS PARA IR A BUSCAR OTROS PUESTOS.
    MEJOR PIENSENLE PRIISTAS, CON AÑORVE NO VA A PROSPERAR EL ESTADO DE GUERRERO.

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