Versiones de los pobladores señalan que como a las 7:00 de la noche del domingo, mientras continuaban los rezos a la virgen de Guadalupe en la iglesia de Tepozonalco, un comando de por lo menos 20 hombres fuertemente armados ingresaron a la comunidad, dejando atravesada a su paso en el acceso principal del pueblo una camioneta para impedir la entrada y salida de personas, mientras desde sus unidades atacaban a balazos las casas de madera y adobe con techos de lámina de cartón.
Después se trasladaron hasta el centro de la comunidad y comenzaron a rafaguear la iglesia, donde las balas alcanzaron a varias personas, dejando muertos a dos hermanos a la entrada del templo católico, identificados como Francisco y Felipe Santos Celis, de 32 y 25 años, respectivamente, además de que resultaron heridas cinco mujeres y tres niños, de quienes no se proporcionaron mayores detalles.
Los pobladores detallaron que a unos 500 metros de la iglesia, también cayeron muertos otros dos hermanos, identificados como Antonio y Regulo de la Cruz Juárez, de 23 y 30 años.
El ataque tomó desprevenidos a los pobladores, quienes en su mayoría se encontraban en la homilía en la iglesia, en la celebración en honor a la virgen de Guadalupe.
Después del ataque los pobladores se organizaron y salieron con dirección a sus casas y sacaron sus armas y comenzaron a repeler la agresión, lo que por lo menos dejó dos heridos al bando que irrumpió en Tepozonalco, según contaron ellos mismos, además de que cuando el comando armado emprendió la huida con las llantas ponchadas de sus unidades.
Dijeron que fue del vehículo que habían atravesado a la entrada del pueblo de donde sacaron a los dos hombres heridos y se los llevaron en otra unidad con dirección a Chichihualco. A las 11 del día se informó que en el camino rumbo a Jaleaca de Catalán, encontraron el cuerpo de un hombre, mismo que al parecer, era parte del comando armado.
El comisario del pueblo, Nicanor Bautista Navarrete, informó que él dio parte a la Policía del Estado y a la 35 Zona Militar, con sede en esta capital, desde la noche del domingo, poco después de que el comando armado se fue Tepozonalco, pero que no llegaron hasta la mañana de este lunes.
Lo cuerpos fueron metidos a sus casas para comenzar a ser velados desde el domingo por la noche.
El ataque provocó que los pobladores se organizaran, y que aún con la presencia de efectivos de la Policía del Estado y elementos del Ejército Mexicano que realizaban rondines por la comunidad, anduvieran armados por las calles para proteger a sus familias de otra eventual irrupción del comando armado, lo que mantiene la situación en un estado de tensión.
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