Agregó García de Tejada que los niños indígenas que en su mayoría se dedican a la venta de artesanías como comerciantes ambulantes y algunos con negocios establecidos en mercados de la localidad, es muy importante para ellos participar en los cursos de verano porque ahí se desarrollan mental y físicamente como cualesquier niño.
Asimismo descartó que haya discriminación hacia los niños indígenas ya que son aceptados como todo infante, porque ya están acoplados al ritmo de vida en general porque todos habitan con sus padres en distintas colonias del puerto.
Dijo que en la Dirección de Asuntos Indígenas actualmente buscan métodos distintos para evitar que los niños indígenas salgan a trabajar a las calles y uno de estos métodos es que todos ayuden a sus padres en la elaboración de artesanías, como fondear barro y elaboración de aretes y pulseras, pero en su mayoría ya no se dedican a la venta ambulante de estas artesanías.
Con relación a los niños que todavía se observan en las calles y playas del binomio turístico ofreciendo sus mercancías a los visitantes, aseguró que poco a poco se ha estado hablando con sus padres para que los manden a las escuelas o se arropen en los programas de alfabetización en los casos de los niños o jóvenes que trabajan para ayudar en el gasto familiar.
Destacó que al finalizar este ciclo escolar más de 60 niños concluyeron sus estudios primarios y todos realizaron los trámites correspondientes para entrar a la secundaria en agosto próximo y seguramente con el programa apadrina un niño que puso en marcha el municipio, la gran mayoría de ellos lograrán continuar sus estudios.
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