FORO POLITICO

Por Salomón García Gálvez.

ZEFERINO SIN PODER, PERO CON ESTRATEGIA.
Exaltado, molesto, visiblemente estresado pero con buena dosis de carga para la rijosidad, fue como se vio ayer el ex gobernador Zeferino Torreblanca Galindo, quien por segunda vez consecutiva arremetió en contra de la administración del gobernador Ángel Aguirre Rivero. La regla no escrita en política de guardar silencio, por esta ocasión, se rompió.
Muy diferente es ver a un Torreblanca Galindo, sin el poder y sin base social que lo respalde. Sus principales allegados casi lo han abandonado, pero cuenta con cercanos, nuevos millonarios que viven y vivirán sin carga de problemas económicos por lo menos durante las próximas dos décadas. Dicen que hay tres cosas que jamás podrán ocultarse: la riqueza, la pobreza y lo pen…itente.
Torreblanca Galindo, rechazó que su administración haya saqueado el erario público, principalmente en las áreas de Educación, Salud y Finanzas, por monto multimillonario. Se habla de más de siete mil millones de pesos. Él, da explicaciones, lo desmiente mediante cifras y gráficas proyectadas en una mega-pantalla. La gente lo escucha y pocos le aplauden. Significa la pérdida del poder.
Sólo sus más leales, lo acompañaron a su conferencia de prensa: La ex Secretaria de Desarrollo Social y potentada empresaria papelera, Gloria Sierra López; el acuatoriano Fernando Donoso Pérez; el ex procurador de justicia, David Sotelo Rosas; el empresario Javier Ibáñez Reyes; el tamaulipeco ex “vicegobernador”, Humberto Sarmiento; el ex asesor (del Cisen), Jesús Vargas; el ex secretario general de gobierno, Israel Soberanis Nogueda; el cuasi fugitivo Sabás de la Roa y el ex líder del Suspeg, Daniel Bautista.
Brillaron por su ausencia: los hermanos César y Jorge Bajos Valverde, Carlos Álvarez Reyes, José Luis González de la Vega, Heriberto Salinas Altés, Enrique Pasta Muñúzuri, Arturo Martínez Núñez, Misael Medrano, Víctor Aguirre Alcaide, Ernesto Rodríguez Escalona, Roxana Torreblanca, Luis Castillo, Luis Barrera Ríos, Rubén Padilla Fierro, Antonio Jaimes Herrera, Alejandro Mendoza, entre otros. Más ex funcionarios de primero, segundo y tercer nivel parece que ya abandonaron a su ex jefe y ex gurú político.
Pero Zeferino no se arredra y arremete en contra de los siguientes personajes: Ángel Aguirre Rivero, gobernador; Lázaro Mazón Alonso, titular de Salud; Alberto López Rosas, procurador de justicia y el Contralor estatal, Julio César Hernández Martínez, a éste último lo llamó “Caligulita”, porque persigue a sus ex colaboradores más cercanos a quienes sancionó por corruptos y ladrones.
El “Z” -dice- ahora “se arrepiente” por no haber encarcelado a los ex alcaldes de Iguala y Acapulco -Lázaro Mazón y Alberto López Rosas- porque ambos malversaron, desviaron y saquearon esos ayuntamientos.
Presentó supuestas pruebas. Afirmó que Lázaro, ahora utiliza un helicóptero para pasearse con un acompañante mientras que el ahora procurador presentó facturas falsas (de Santo Domingo, DF) para solventar sus cuentas públicas de cuando fue edil del puerto.
Torreblanca Galindo, tiene su estrategia: ya no aspira ser candidato a senador por el PAN; ahora aspira ser candidato panista por segunda vez a la alcaldía de Acapulco. La pregunta surge de inmediato: ¿Si el PRD se divide en el puerto, si se pelean Walton y Rumbo, ganaría Zeferino esa contienda?
En el hipotético caso que esto ocurriera, lo cual se ve muy difícil, ¿sería cómodo para Ángel Aguirre Rivero, que Zeferino se quede otra vez con la joya de la corona?
Lo cierto es que luego de la conferencia de prensa ofrecida por Torreblanca Galindo, se entiende que cuenta con información oportuna de la actual administración aguirrista, lo cual también denota que tiene buenos informadores -soplones- infiltrados que lo mantienen al tanto.
También se tiene la percepción de que el ex gobernador cuenta con información nada grata que ahora lo mantiene muy intranquilo: que el gobierno federal podría proceder judicialmente en su contra por delito de peculado, como ocurrió con su ex homólogo de Chiapas, Pablo Salazar Mendiguchía, quien se actualmente se encuentra preso en un penal del país.
El gobierno panista-calderonista, en su recta final, podría dar golpes de gran impacto para reposicionarse a nivel nacional, enviando a prisión a varios ex gobernadores: Ulises Ruiz (Oaxaca), Mario Marín (Puebla) y Zeferino Torreblanca (Guerrero). Tal escenario, sólo es hipotético.
Al final de cuentas lo que buscaría el arrogante ex mandatario Torreblanca Galindo, es negociar y pactar impunidad no sólo para él sino para sus más cercanos y que le garanticen tranquilidad en el futuro como ocurría durante el reinado priista.
Además de amenazar con demandar penalmente al Contralor estatal, -“El Caligulita”- Julio César Hernández Martínez y expulsarlo de Guerrero, como buen actor, el ex mandatario Torreblanca Galindo advirtió que continuará su “periplo” por la entidad ofreciendo más conferencias de prensa.
Y responsabiliza al actual gobierno “de lo que pueda pasarle a él y su familia”. ¿Se victimiza Zeferino, para despertar entre los guerrerenses un sentimiento de compasión? ¿A poco ya se le terminó la arrogancia?
La pregunta final, es: ¿Cederá el gobernador perredista, Ángel Aguirre Rivero, ante la presión y el golpeteo de su antecesor?... Punto.
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