OPINION

UNA RECOMENDACIÓN SESGADA
La Comisión Nacional de Derechos Humanos dio a conocer 30 recomendaciones emitidas en torno a los hechos sucedidos el pasado 12 de diciembre en el lugar conocido como Parador del Marquez. El documento no causó ninguna sorpresa, porque ya lo esperábamos en su contenido.
Se trata de una investigación muy mal llevada, donde la CNDH eleva a los vándalos de Ayotzinapa al nivel de víctimas inocentes, que sufrieron graves violaciones a sus derechos humanos, durante el “violento desalojo de su protesta en la autopista del sol”.
Sin tomar en cuenta que los cuerpos de ambos estudiantes asesinados a balazos no tenían en su interior ninguna esquirla de bala y fueron movidos por sus compañeros, lo que imposibilita conocer realmente la dirección de los disparos que los privaron de la vida, la CNDH acusa a los dos ministeriales presos por esa causa, sin tomar en cuenta que por lo menos uno de ellos resultó negativo a la prueba de la parafina.
Resulta irónico y hasta reprobable que la CNDH en sus recomendaciones de más de 150 hojas, solamente en una ocasión cite el nombre de Gonzalo Miguel Rivas Cámara, como si no existiera este asesinato; aunque solicita que se agilicen las investigaciones para esclarecer este crimen, omite pedir que se interrogue a los estudiantes de Ayotzinapa que provocaron el incendio de la gasolinera.
La CNDH no emite recomendaciones a particulares, solamente a las autoridades federales y en este tipo de casos a gobiernos de los Estados; pero en este caso bien pudo solicitar públicamente a los estudiantes de Ayotzinapa, que dejen de conducirse como delincuentes cuando realicen manifestaciones en las calles demandando solución a sus problemas.
Estos vándalos secuestran vehículos con sus conductores, roban las pertenencias de los pasajeros cuando son bajados por la fuerza de los autobuses para llevárselos consigo, pintarrajean paredes, lanzan bombas molotov contra edificios públicos, bloquean arterias, generando severos daños a la sociedad, pero para la CNDH son unos santos que jamás cometen daño alguno.
Falla también la Comisión cuando habla de una atención inadecuada e intolerante por parte del gobierno estatal a través de la SEG, para las demandas de los estudiantes. Ignora que el Gobernador Aguirre Rivero se había reunido con ellos hasta en tres ocasiones, que les apoyó con vehículos y remodelación de su escuela: que los trató como seres humanos y ellos abusaron de esta actitud. ¿Qué clase de investigación vinieron a hacer los visitadores?
La Nacional exige en su recomendación  que los Gobiernos federal y del Estado ofrezcan una disculpa pública por las violaciones y los asesinatos de los dos estudiantes. Sin embargo, esta disculpa no debe llevarse a cabo sin que se esclarezca el homicidio imprudencial de Gonzalo Rivas Cámara. Porque todo apunta a que fueron gentes de Ayotzinapa quienes provocaron el incendio y no se puede premiar a delincuentes hasta que se demuestre lo contrario.
Como lo apuntamos con oportunidad, la recomendación que dio a conocer la CNDH se empeña en echarle toda la culpa de las violaciones a los derechos de los estudiantes al Gobierno del Estado, exculpando de esa forma a la Policía Federal, que fue quien encabezó el operativo, inició los disparos en forma masiva y enfrentó directamente a los “ayotzinapos”.
Las recomendaciones de derechos humanos tienen fuerza moral pero no legítima, por lo que quienes la reciben pueden cumplirlas, o no aceptarlas si se considera que faltan a la verdad. El Gobierno del Estado debe ser muy cuidadoso en el cumplimiento de estas, aunque existe en el mandatario Aguirre Rivero amplia disposición para que se les dé una respuesta positiva a cada una.
Es necesario que el Ministerio Público encargado del caso, cite a los estudiantes de Ayotzinapa para que declaren en torno a la forma como incendiaron la gasolinera. Porque ellos también tienen una enorme responsabilidad en este lamentable acontecimiento, donde un hombre honesto y trabajador como Gonzalo Miguel perdiera la vida tratando de salvar con su acción heróica, hasta a sus propios asesinos imprudenciales.
manueltello2002@yahoo.com 

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