MEMORÁNDUM

Por Gerardo Ruano Cástulo

*** Altas expectativas ante el regreso de Mario Moreno Arcos. 

El nivel o grado de expectativas es grande, tanto dentro como fuera del Ayuntamiento de Chilpancingo, ante el regreso de Mario Moreno Arcos como alcalde de la capital del estado. No es para menos. Durante su primera gestión edilicia se convirtió en el mejor presidente municipal que ha tenido éste municipio en toda su historia. Su trabajo cercano a la gente, mediante audiencias públicas, y la concretización de cientos de obras por colonias y comunidades, dejaron una grata sensación en los habitantes de la capital.

Así es. Cuando Mario Moreno Arcos dejó la presidencia municipal, culminando su periodo completo, a finales del año 2008, lo hizo entregando una gestión con las calificaciones más altas. Se le conoció por ser el mejor alcalde de todo el estado, y por estar, hay que decirlo, entre los mejores de todo el país, al contar con un promedio de aceptación de alrededor del 90 por ciento. Lo que constituye una calificación muy elevada, para un municipio que se ubica dentro de los más complicados para gobernar, ante la enorme cantidad de problemas y necesidades que existen, especialmente en materia de servicios públicos.

El grado de expectativas, de lo que espera la ciudadanía, ahora en el nuevo periodo que le tocará gobernar la capital del estado, según estudios de opinión aplicados por una consultoría local, es sumamente positivo. El estudio revela que al interior del palacio municipal, alrededor del 20 por ciento ven excelente su regreso y más del 60 por ciento lo califican como bueno. Cifras similares se encontraron en colonias y barrios de la capital, en donde se habrían encuestado a más de dos mil personas. Lo que refleja con claridad, que la gente espera un buen gobierno.

Pero no solo eso, el estudio muestra además, que Mario Moreno Arcos es el político mejor calificado en la capital del estado. El que más y mejores resultados ha ofrecido con su trabajo. El que ha estado más cerca de la gente. Y el que atiende de mejor forma a la ciudadanía. La empatía que tiene el futuro alcalde de Chilpancingo con los habitantes de su municipio es muy grande. Las calificaciones hacia su trabajo siempre son elevadas. Y todo en función a lo que ha hecho a lo largo de su trayectoria política.

Apenas hace un par de días, Moreno Arcos encabezó una gira por la montaña baja del estado y la zona centro, en municipios donde puso en marcha obras sociales que gestionó cuando fungió como diputado federal. Estuvo acompañado por alcaldes y líderes del área, lo que habla, por sí solo, de los resultados que ofreció en su más reciente encargo que ocupó.  

Acostumbrado a dar muy buenos resultados, es natural que la ciudadanía espere mucho de su nueva gestión. Tal y como lo reflejan los estudios de opinión. Después de una gestión exitosa entre los años 2005 y 2008, lo que se espera es que Mario Moreno Arcos supere sus propias marcas. Su mano se vea en la eficacia de los servicios públicos y su liderazgo se refleje en la gestión de los grandes proyectos que necesita la capital del estado, comenzando por el asunto del agua, y pasando por obras como las siguientes: relleno sanitario, central de abastos, panteón, rastro, entre otras.

El reto ahora es mayor. Y lo que se ve, con relación a la percepción ciudadana, es que la gente espera mucho del político mejor evaluado en la capital del estado. Lo que significa, que Mario Moreno tiene en sus manos una excelente oportunidad, para poder capitalizar esas expectativas, y traducirlas en una suma de voluntades, a efecto de encauzarlas en un proyecto en común. Esa es la cuestión.

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