LA RUEDA DE LA FORTUNA

Por Alfredo Sarabia
Teletón, mascarada desafortunada.

El próximo Teletón tendrá verificativo durante los días 7 y 8 de diciembre de este año que terminará en poco más de un mes.  El teletón, es un evento de caridad y ”altruismo” y siempre ha sido conceptuado como “un proyecto de unidad nacional donde los mexicanos tiene la oportunidad de reunirse y trabajar por una misma causa”, según se nos dice repetida y reiteradamente. Desde el año de 1997 se ha desarrollado este evento, uno por cada año. La empresa de televisión más vista por los mexicanos, Televisa, es la que se encarga de que esta situación barnizada bajo una obra caritativa, se lleve a cabo felizmente. Alrededor de 39 horas consecutivas, inundan a la población de imágenes de infantes con problemas de locomoción, del lenguaje, de articulación y demás cosas que prácticamente mantienen maniatados y condenados al sufrimiento a los pacientes que ahí presentan y obviamente el efecto que estos producen en el televidente es de angustia y de lástima.

Al principio de esto, todo mundo lo miramos con cierta simpatía, pues a los ojos de todos nosotros, lo que estaba haciendo Televisa era una situación, aparentemente colmada de amor hacia esos niños marcados por la infelicidad que acarrean los padecimientos naturales o congénitos que obstruyen las capacidades de movilidad, principalmente. Sin embargo, hoy día, esta situación favorable y ciega de ver el Teletón, ha cambiado y ha cambiado  desfavorablemente debido a que se empiezan a saber cosas que ponen en “tela de juicio”  la justeza  del acontecimiento citado.

Son dos grandes razones  para dudar de esta situación:

1.- Cada empresa, está obligada a pagarle impuestos al fisco, un gravamen que sería utilizado por el gobierno federal en la consecución de satisfacer intereses colectivos como Educación, Seguridad,  realización de Obras, etc. Pero pueden no pagar a Hacienda Federal, haciendo o desarrollando eventos como el Teletón, esto le evita a Televisa no pagar un solo centavo de impuesto, puesto  que el dinero  recabado, se lo deducen del pago obligado, es decir, la gente da aportaciones desinteresadamente, hasta que alcanzan la meta  de recaudación fijada, o sea que Televisa, “saluda con sombrero ajeno”, ya que en realidad, la gente que coopera desinteresadamente,  paga los impuestos que esa empresa debe pagar. Negociazo redondo de estos especímenes que lucran insensiblemente con el dolor y desconsuelo de los niños.

2.- El gobierno tiene la obligación de dotar a la población de infraestructuras de salud, como los hospitales de rehabilitación, por citar algún ejemplo, que pomposamente presume Televisa. Sin embargo,  esta cuestión de Televisa, libera al Gobierno de cumplir con su tarea, pero a un precio muy elevado, al no pagar sus impuestos como deben ser.

Con esta situación, Televisa sale ganado doblemente, ya que por un lado no paga sus impuestos (la gente es la que se los paga) y por otro lado, la empresa  de Emilio Azcárraga Jean, pasa ante los ojos de los demás, como una empresa altruista, dadivosa, que le interesa la vida de los niños caídos en esa desgracia que dicen combatir; ya que sin duda este evento es loable y plausible, pero no es tan honesto como nos lo pintan, como nos lo hacen creer.

Luego entonces, la simulación de Televisa en contubernio con el Gobierno, hacen del Teletón, una mascarada cruel y desafortunadamente en esta falsedad, se llevan entre las patas a la sociedad….HASTA PRONTO.