MEMORÁNDUM

Gerardo Ruano Cástulo
*** En marcha, comité de evaluación de daños

El Gobierno de Guerrero, que encabeza el Gobernador Ángel Aguirre Rivero, informó de la instalación del comité para la evaluación de daños causados por la tormenta tropical Manuel en la entidad suriana. Dicho órgano, tendría que emitir un informe que serviría de base para calcular los montos económicos que se necesitan para la reconstrucción y reordenamiento del estado. Una tarea titánica, sin lugar a dudas. De entrada, porque los canales de comunicación están demasiado lastimados. La infraestructura carretera y los caminos rurales están prácticamente destrozados. Y ante esto, se impone la eficaz coordinación y organización de los tres niveles de gobierno. Así es. Los daños y pérdidas son incuantificables. Desde esa perspectiva, es importante la creación de un comité que se dedique específicamente a calcular la magnitud de las afectaciones, en los diferentes terrenos del desarrollo, a efecto de que, por medio del orden, se pueda dar paso a la reconstrucción y reordenamiento del estado. La instalación de un comité de evaluación, del que informa el gobierno de Ángel Aguirre, es una señal clara, de que no hay espacio para la pérdida de tiempo y que se tiene que ir avanzando en el terreno del diagnostico para la agilización de los recursos destinados a la reconstrucción y el reordenamiento. Es cierto, que aún las tareas de rescate y ayuda a los más seriamente afectados aún no terminan. Pero el gobierno hace bien en multiplicarse y buscar ir avanzando en otras prioridades. El gobernador ha dado tareas específicas a cada uno de sus colaboradores y a éstos se les ha visto por las diferentes regiones de la entidad. Y qué decir del DIF estatal, en donde la Sra. Laura del Rocío Herrera ha intensificado las acciones sensibles de su gestión, llegando a un gran número de familias con apoyos en materia de asistencia social. Dentro del marco de sus posibilidades, sería mezquino negar, que el gobierno de Guerrero ha puesto mucha entrega, sensibilidad y atención en las horas más complicadas que ha vivido el estado. Y hoy se reafirma, con la puesta en marcha del comité para la evaluación de los daños. En éste marco, lo que se impone, como parte de una buena estrategia de administración pública, es la adecuada integración y organización entre los tres niveles de gobierno. No olvidar aquí, que la mayoría de los municipios sufrieron afectaciones, y luego entonces, se debiera escuchar a los alcaldes. Sin dejar de lado el aspecto de la previsión, que tiene mucho que ver con el reordenamiento que se debiera aplicar en el estado. No hacerlo, será como sí el paso de Manuel, no nos hubiese dejado lección alguna, y que la reconstrucción será sobre terreno falso. El comité de evaluación de los daños, no solamente debe contemplar las cifras de la catástrofe, sino un esquema de previsión, en el que se establezcan las bases del reordenamiento, con la idea clara, de construir en realidad un Nuevo Guerrero. Remendar simplemente lo que se ha roto, sería, en estos momentos, un acto de negligencia histórica. La reconstrucción, después de la magnitud del desastre, no se puede entender, sino va acompañada del reordenamiento. No se trata de los derechos de la naturaleza y esas cosas. Señores, es cuestión de dar su lugar a la dignidad humana. Esa es la cuestión