MEMORÁNDUM

Gerardo Ruano Cástulo
*** Mario Moreno; informe a la altura de las circunstancias.

Desde el Ayuntamiento de Chilpancingo llegan las señales claras del proceso que se habrá de seguir, después del desastre ocasionado por la Tormenta Tropical Manuel. No hay espacio para gastos extraordinarios, ni para pensar en otra cosa. La prioridad es la reconstrucción y el reordenamiento. Por eso, el alcalde Mario Moreno Arcos, en el marco de su primer informe de trabajo, habría señalado que los planes presupuestados han cambiado y que los recursos serán destinados con éste objetivo. Así es. Se sabía, que antes del paso terrible de Manuel por suelo Guerrerense, el cabildo capitalino tenía la intención de sesionar en el Auditorio Sentimientos de la Nación, para que en ese recinto, el presidente municipal presentara al público los resultados de los primeros 365 días de su gestión. Los acontecimientos lamentables trajeron consigo muchos cambios de planes. El informe se realizó acorde al momento que se está viviendo. En el auditorio José Inocente Lugo del Palacio Municipal, en donde fue evidente la austeridad y el manejo discreto de los avances. Nada de excesos. La atención se fijo en lo que habrá de venir. En el proceso de reconstrucción. De entrada, Mario Moreno sí tenía muchas cosas positivas que informar. La obra pública de su gobierno se ve en todas las localidades. En la capital del estado se ve el sello de su gestión en el embellecimiento de la ciudad. Se aprecia en los recursos que se están aplicando para mejorar el abasto de agua. Se ve en la calidad de sus gestiones ante los gobiernos, federal y estatal. Se palpa en la forma en que gobierna, escuchando y atendiendo a la gente. En resumen, tiene material para mostrar que su gobierno es un gobierno de resultados y que le ha apostado a la transformación de la capital. Sin embargo, los tiempos no están para hacer fiestas y mostrar con euforia los avances que se registran. Y si en condiciones normales, Mario Moreno ha demostrado ser un político serio y maduro, hoy no podía ser la excepción. Por eso, le apostó a cumplir con lo dispuesto en la ley, en lo relativo a su informe de trabajo, pero con la gran diferencia, de hacerlo en un marco total de austeridad y sencillez. Con esa postura, el alcalde de Chilpancingo acabó por enviar mensajes muy claros. El primero de ellos, es que es respetuoso del marco legal. Y segundo, que más allá de eventos e informes, su prioridad está depositada en la reconstrucción y reordenamiento de su municipio, ante el desastre dejado por la Tormenta Manuel. Esto, por donde se vea, es una magnífica noticia para todos los habitantes de su municipio, especialmente para quienes resultaron con mayores afectaciones. Hoy algunos cuestionan lo modesto del informe. Pero seguramente, si hubiese sido de otra forma, estos mismos dirían que mientras la gente sigue con grandes problemas de afectación, el alcalde se preocupa por su imagen. Lo cual, como ya vimos, es completamente falso, ya que más allá de reflectores y buscar aumentar sus bonos, Mario Moreno ha trabajado con mucha discreción y efectividad, en la situación de emergencia. Se viene para Chilpancingo un proceso serio de reconstrucción. Los planes ya se han comenzado a adecuar a esa prioridad. La señal que envía Mario Moreno, es que los tiempos son de trabajo para sacar adelante a la capital, después del desastre ocasionado por Manuel. Y para ese proceso, no hay duda, que se requiere de un liderazgo serio y con mucha madurez política. El alcalde capitalino está a ese nivel y estatura. Acorde a lo que demandan hoy las circunstancias. Esa es la cuestión.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario