LA RUEDA DE LA FORTUNA

Por Alfredo Sarabia
En Atoyac de Álvarez, La Pintada, soslayada y olvidada

La Pintada, nombre que recibe una comunidad enclavada en la sierra de Aroyac de Álvarez, la más desarrolladas en la citada zona, si partimos de su generación de hace algunas décadas del siglo pasado, ha sido devastada por el ciclón Manuel, que recién azotó fuerte y trágicamente en nuestro estado de Guerrero. En este poblado murieron decenas de personas, que aún no se precisa la cantidad de muertos, por la sencilla razón, de que no terminan todavía de desenterrar los que presumible se ubican en la zona del desastre. Es conveniente recordar, que en este otrora apacible y trabajador pueblo, un cerro vecino a la localidad, se desgajó, se vino abajo inesperada y sorpresivamente el día de inicio de la Independencia, y casi cubrió todo el espacio habitado.
Debajo de las miles de toneladas de tierra, quedaron muchos cuerpos. ¿Cuántos? Quien sabe, pero se calculan cifras cercanas a 80. Esta gran contrariedad trágica, motivó a que gente como Laura Bozzo, famosa conductora de Televisa, fuera a ese lugar, para montar su teatro habitual y no para llevar la ayuda vital y necesaria urgida en ese momento. Esto ocurrió 4 días después de la desdicha ocasionada por el mencionado derrumbe del cerro. Sin embargo, a más de tres semanas de haber transcurrido ese percance sangriento y demoledor, aún se pueden observar escenas dantescas de las condiciones actuales de los efectos destructores y exterminadores que dieron fin a esta comunidad, escenas que parecen muy frescas, como si apenas ayer hubieran sucedido las cosas. En este ambiente, únicamente se pueden visualiza alrededor de dos decenas de hombres trabajando allí, entre ellos están los llamados topos, soldados, elementos de la Marina y alguno que otro civil, no más. No obstante lo denodado y el esfuerzo de estos amigos, es muy notorio la ausencia de Maquinaria que ayude a remover los pesados escombros y la misma volumétrica tierra que mantienen a los familiares de las víctimas sepultadas viviendo en la angustiosa situación de saber que seres cercanos y queridos, se encuentra n horriblemente sepultados por el mortal e inesperado alud de tierra. La impotencia y desesperación los inundad feamente. Hoy, las máquinas especializadas en esos menesteres, brillan por su ausencia en ese fatídico lugar, nadie de los gobernantes, ni el municipal, ni el estatal, ni el federal, han hecho sentir su presencia de manera significativa, ya que cuando se les ha visto por allí, han ido solo para tomarse la foto, han ido en plan turístico. Las despensas aquí, no han surtido los efectos tranquilizantes y adormecedores de otros lugares. Si bien es cierto que estas han jugado un relevante papel en este desastre, también es cierto de que estas en la comunidad siniestrada de La Pintada, no han causado la emoción esperada. “Nosotros no queremos despensas, ni que nos paguen nuestras casas, lo que queremos es sacar a nuestras familias, nada mas vienen se toman la foto, prometen y se van, aquí necesitamos maquinaria, porque con pala y pico no avanzamos nada, y si no nos apoyan yo voy a seguir buscando”. Así se resume el sentir de una persona habitante de la citada comunidad, que hoy, quiere a sus muertos inesperados….HASTA PRONTO.