MEMORÁNDUM

Por Gerardo Ruano Cástulo
  *** Hechos y dichos

Robert T. Kiyosaki, autor de diferentes libros relacionados con la filosofía del éxito y educación financiera, habla de la importancia de tomar decisiones fundadas en los hechos y no en las simples opiniones. En el mundo actual, existen muchas historias de fracaso y miseria, en función del predominio de gente que acepta los rumores como cosas ciertas y los dichos como hechos consumados. Así es. Las opiniones no siempre están sustentadas con el valor de los hechos. Por eso, Robert Kiyosaki plantea en sus diferentes textos, comenzando con la serie: “Padre Rico, Padre Pobre”, la importancia que tiene mejorar la calidad de la mentalidad.
 Ese es el primer gran paso en el camino hacia el éxito. Si bien es cierto, sus obras versan más sobre los temas financieros, tener una mentalidad de calidad es importante para lograr mejores resultados en todos los campos de la vida. Dentro de esos ajustes, es preponderante hacer caso a los hechos y no a los dichos. Traigo éste tema hoy, porque es evidente la ola de rumores que se han soltado, en torno a diferentes situaciones relacionadas con la contingencia provocada por la tormenta tropical Manuel. Hemos expuesto, que la situación no se puede desligar del contexto político. Y no se puede hacer, porque sencillamente, en el proceso de apoyo y reconstrucción están involucrados personajes que podrían buscar otro encargo público en las elecciones de 2015. Desde esa perspectiva, muchos de los movimientos se observan desde ese color del cristal. De ahí, que si se anuncia que se castigará a quienes hayan influido en el incremento de los daños provocados por Manuel, ya sea por omisión, negligencia o corrupción, no faltan quienes ya desde ahora, aducen que se trata de un acto de presión política para favorecer a algún proyecto político. Cuando lo único cierto del caso, es que si el Gobernador Ángel Aguirre Rivero, y el presidente del país, Enrique Peña Nieto, se comprometieron a hacer justicia al respecto, lo que se espera es que lo hagan. Trátese de quien se trate, sin importar filiación partidista. Entonces habría que esperar los resultados y no hacer caso a la ola de rumores. Otro asunto que me llamó la atención, es el comentario de un dirigente perredista que intenta exhibir al presidente municipal de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos, como un político que desea aprovechar la desgracia para fortalecer su aspiración en la búsqueda de ser candidato a gobernador. Y al mismo tiempo, lo quiere mostrar como insensible, al no entregar apoyos para que fuesen llevados a la comunidad de Jaleaca de Catalán, en la que según le dijeron, los apoyos solamente se han entregado a los priístas. De entrada, y apegándonos a los hechos, en los últimos días, el alcalde ha estado visitando las comunidades de su municipio, estableciendo hasta hoy, que en función de los daños, siete comunidades deben ser reubicadas totalmente. O sea, ni es insensible, y mucho menos se ha olvidado de las comunidades. En el fondo del asunto, el hecho es que un dirigente perredista se lanzó en contra de Mario Moreno y de su aspiración por ser gobernador. En pocas palabras, la pregunta es muy sencilla: ¿No es él entonces, quien quiere sacar ventaja del desastre, para mermar la imagen del alcalde capitalino y beneficiar a su partido? Que se recuerde, en medio de la desgracia, el presidente municipal de Chilpancingo, no ha hecho manifestación alguna sobre sus aspiraciones políticas. Se ha dedicado a trabajar y todos sus esfuerzos están depositados en la reconstrucción de la capital del estado. Más hechos y menos dichos. Esa es la cuestión.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario