MEMORÁNDUM

Gerardo Ruano Cástulo
*** Nuevo relleno sanitario; un reto para 2014.
 Estamos caminando sobre las últimas horas del año 2013. Las reflexiones se enfocan hacia el saldo que nos han dejado los últimos 365 días. Y desde luego, los retos y desafíos que se vienen para el año 2014. En lo particular, me llama la atención, uno de los grandes retos que tiene enfrente el gobierno municipal de Chilpancingo, que hoy está en manos del alcalde Mario Moreno Arcos, y no se trata del asunto de la falta de agua, sino de mejorar la calidad ambiental, mediante la instalación de un nuevo relleno sanitario, que cumpla con las normas, y resuelva uno de los más grandes y graves problemas que por años se ha venido postergando en la capital. Se habla de que están sentando las bases para concretizar un relleno sanitario regional, en donde podrían participar además los municipios de Tixtla y Eduardo Neri. Esa sería, hay que decirlo, una obra de alto impacto social. Así es.
La capital del estado ha padecido graves problemas ambientales ante la mala ubicación de su relleno sanitario. Para pocos es un secreto, que la basura no solamente produce malos olores, sino que es el hábitat ideal para que se reproduzcan diferentes tipos de fauna nociva, y por supuesto, entre éstos, bacterias, amibas y hongos, léase parásitos, que llegan con facilidad a los domicilios de los habitantes de la ciudad, por el efecto y ayuda del aire. Las enfermedades respiratorias y diarreicas se ven por todo el año. La autoridad municipal no desconoce lo grave de la situación, Y más aún, que tiene que buscar una solución pronto. De hecho, 2013 es testigo de que el alcalde Mario Moreno Arcos, ya tenía proyectada la reubicación del relleno sanitario y que esto no se concreto ante la negativa de habitantes de algunas comunidades, que advirtieron la posibilidad de daños en su entorno ambiental, a pesar de que había estudios que parecían decir lo contrario. El presidente municipal desistió en esa zona, no porque fuese inviable el proyecto, sino porque Chilpancingo había sido golpeado por diferentes movilizaciones, y se entiende, que lo que menos deseaba era dar carnita a lucradores sociales, de esos que de inmediato se trepan a estos barcos. 2013 está por concluir, con la noticia de que se buscan los acuerdos y consensos para crear un relleno sanitario regional, entre los municipios de Chilpancingo, Tixtla y Eduardo Neri. De concretarse en 2014, ésta será una obra de alto impacto social, porque no solamente resolvería el problema de la disposición final de la basura, sino que se vería en la calidad ambiental y el mejoramiento de la calidad de vida de los habitantes de los tres municipios. El reto y la oportunidad ésta enfrente de los tres alcaldes. El de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos, ha tomado la iniciativa de buscar una solución al problema que padecen los capitalinos desde hace ya varios años. Su postura refleja que entiende que es un asunto que no se puede postergar más. Por lo que representa en cuanto a la calidad ambiental y la salud de la gente, es hasta hoy, una pena que la obra se haya retrasado. Y más aún, cuando dentro de las leyes de la vida, sabemos que si hay algo que daña severamente, es la dilación. El dejar las cosas para después o para el famoso mañana. 2014, abrirá sus brazos con la esperanza de que los capitalinos tengan un nuevo relleno sanitario. Y con ello, el impacto en el ambiente y la salud sean positivos. Éste es uno de los más grandes retos y desafíos que tiene enfrente el gobierno municipal. Esa es la cuestión.

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