Ixtapa Zihuatanejo Gro. 12 de Febrero de 2014.-Desde hace mas de 50 años, el paseo del pescador, era el paso obligado de los habitantes del puerto que caminaba desde el caserío hasta el único muelle de madera construido en la playa principal en donde adquirían los abundantes productos marinos de la temporada o bien para laborar en la carga y descarga que albergaban en la Casa Marina , en ese entonces bodega de la CROM que mas tarde transportaban en los dos barcos que navegaban desde el puerto de Acapulco a Zihuatanejo, el María Marta o el Oviedo que transportaban pasajeros.
Al paso del tiempo, el paseo del pescador se convirtió en un paseo obligado para las familias porteñas que los domingos especialmente, paseaban por las tardes –noches por el paseo del pescador hasta llegar el anuncio que el encargado de la planta de luz apagaría las pocas luces que alumbraban las estrechas calles y no muchas casas del Zihuatanejo de ayer.
Fueron surgiendo a lo largo del paseo del pescador y frente a la playa principal del puerto, las casas de bajareque bien talladas con lodo y pintura, propiedad de algunas gentes adineradas como se decía en la época que mas tarde fueron acondicionadas como restaurantes o casas de huéspedes como Casa Eugenia, Doña Elvira con Julio Diego y porque no recordar la casa de Don Arend Bonn Rieguen, un alemán avecindado en el paseo del pescador que corría por el hotel Belmar, Casa Arcadia de Don Carlos Barnard y el palacio de piedra donde se ubicaban oficinas federales y actualmente convertido acertadamente en el museo regional de la costa grande.
El paseo del pescador ha sufrido a lo largo de los años varias transformaciones en su infraestructura siendo esta ultima la que le ha dado el rostro de un paseo de tradición con el cambio de la imagen urbana del mismo hasta pegar con este paseo el andador playa la madera que construido entre las rocas dio otra imagen de puerto a la playa principal y playa de la madera.
Actualmente, el paseo del pescador es una atractivo turístico bien estructurado en pleno centro de Zihuatanejo porque en su trayectoria de poco más de un kilómetro, se ubican poco mas de 20 restaurantes que contra viento y marea instalan mesas con sus respectivas sombrillas robando metros al paseo del pescador que con esta nueva imagen luce como con ese tipo de negocios como una plaza al mas puro estilo de las que se ven comúnmente en Europa.
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