*** Mario Moreno; actuar y nunca quedarse cruzado de brazos
El asunto de la seguridad pública no es cosa fácil. Requiere de una estrategia integral que involucre a los tres niveles de gobierno y a la misma ciudadanía. Ante el crecimiento del problema, es evidente que los municipios están limitados para hacer frente a la situación. El hecho no es privativo de algún sitio en particular. Ni del último año. Todo el sexenio pasado, las notas de violencia e inseguridad inundaron al país.
En Chilpancingo, la estrategia implementada, en donde la policía federal asume el control de la seguridad pública, es un hecho, que lejos de evidenciar al presidente municipal, Mario Moreno Arcos, lo ubica como un hombre que sabe del tamaño del problema, y que por lo mismo, le apuesta a la implementación de acciones de otro nivel, y que en el mismo sentido, lo ubican como un político que no tiene ningún otro interés, que no sea el de que regrese la paz y tranquilidad a los capitalinos.
Así es. Los últimos acontecimientos demuestran que el alcalde capitalino está haciendo su parte. Después de los ataques que se han vertido a su persona, se ha dedicado a buscar soluciones y dar mejores resultados a la gente. Y como prueba de ello, se centró en un dialogo importante con el Gobierno del estado y la federación, a efecto de concretar una estrategia de mayor impacto en el terreno de la seguridad pública. El hecho de que haya aceptado que la federación tome el control de la situación en ese rubro, no significa que renuncie a cumplir con sus responsabilidades, si así fuese, simplemente se habría quedado cruzado de brazos, algo que nunca se ha visto en Mario Moreno, quien siempre ha sido un político de acción.
Sin duda alguna, la inacción e indiferencia habría sido la peor decisión. En cambio, el presidente municipal decidió actuar. Tomar cartas en el asunto. Y optó por apoyar un proyecto de mayor impacto, en congruencia con la responsabilidad de trabajar en pro de la tranquilidad y paz de los capitalinos.
Ahora bien, no se trata solamente del cambio de mando y la llegada de más policías a la capital del estado. El alcalde Mario Moreno está trabajando para generar más acciones que ayuden a la reconstrucción del tejido social. Y una prueba de ello, es que mediante los programas de prevención del delito y la violencia, llegarán recursos a la ciudad para construir nuevos parques, una ciclopista y un espacio para el skate, a efecto de que los jóvenes tengan un lugar digno para hacer sus suertes con la patineta.
Tal vez sus detractores habrían querido que Mario Moreno se quedara cruzado de brazos. Que no aceptara un plan de mayor impacto. Que se conformara con el trabajo limitado de la policía municipal. En éste caso, se equivocaron. Ya que el alcalde capitalino, tal y como deben hacerlo las personas que tienen responsabilidades en sus manos, ha tomado una decisión, y es evidente, que está dispuesto a correr los riesgos. El punto es, que con un programa de ésta índole, tiene más que ganar que perder. Porque lo que busca, es el beneficio directo en la seguridad de la gente.
Por otra parte, en algo que tampoco debe haber caído bien a sus detractores, el Instituto Electoral del Estado de Guerrero exoneró al alcalde de las acusaciones que le hicieran por supuestos actos de campaña adelantada. O sea, que Mario Moreno va hacia adelante. Esa es la cuestión.
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