MEMORÁNDUM

Por Gerardo Ruano Cástulo

*** La perseverancia de Mario Moreno en la reconstrucción

La pronta construcción de 400 casas, para los damnificados que dejara la tormenta Manuel en Chilpancingo, es una señal clara, de que el presidente municipal, Mario Moreno Arcos, no ha permanecido cruzado de brazos. Su insistencia y perseverancia en la búsqueda de concretar los apoyos de la federación, darán en breve, otro resultado más.   Así es.

La tarea de reubicación de las familias que perdieron sus casas, no ha sido para nada fácil. Sabemos, que en la capital del estado escasean los terrenos que cumplen con todas las factibilidades para el acceso a los servicios, y que además, gocen de las garantías de seguridad ante el embate de los fenómenos meteorológicos.

Aunado a eso, el alcalde ha tenido que lidiar con las presiones políticas, que de manera natural, desafortunadamente, surgen en medio de las tragedias, de gente oportunista que solo desea llevar agua a su molino. Inclusive ahora, se escuchan voces de que las casas estarán chicas, como si se tratara de construirles mansiones, cuando el objetivo central es ayudarles después de la tragedia, pero no resolverles sus problemas de por vida. Es lamentable, que haya quienes confundan el apoyo con una pensión vitalicia. 

En medio de esas aguas, ha tenido que nadar Mario Moreno, quien al final de cuentas, después de lograr conseguir el predio, y estar tocando la puerta en la federación, habrá de entregar un resultado más de su trabajo. Se dice fácil que son 400 viviendas. Pero detrás de esto, está la mano de un presidente municipal, que no ha quitado el dedo del renglón para acelerar todo el proceso de reconstrucción en la ciudad. Entre ello, dar un espacio digno a las familias que perdieron sus hogares.

Es evidente, que desde el centro del país, el apoyo no ha fluido de manera caudalosa. Ha venido llegando gota a gota. Sin embargo, en lo que concierne al municipio, el alcalde ha estado atento de que las obras se hagan con eficacia, y en el menor tiempo posible. Comenzando inclusive, con las que tienen que ver con la prevención, como es el caso de la limpieza de las barrancas, así también, la instalación del consejo de protección civil, que ya desde ahora, está atento ante cualquier eventualidad.

Al mismo tiempo, Mario Moreno no se distrae de los demás asuntos que le competen como autoridad municipal. El programa de obras sigue por buen curso. Entre ellos, el de electrificación, en donde el proyecto es ambicioso y agresivo, toda vez que con la Comisión Federal de Electricidad, se ha establecido un convenio de trabajo, a efecto de llevar el servicio a todas las colonias de la ciudad.

Lo de las 400 casas, que en breve estarán listas, en beneficio de los damnificados, no es más que la consecuencia del trabajo de un presidente municipal que no quita el dedo del renglón, en los trabajos de reconstrucción y las obras que impulsan la transformación de Chilpancingo.

Mario Moreno, en virtud de esa perseverancia que le distingue, entregará pronto a los damnificados, con el apoyo del presidente Enrique Peña Nieto, un espacio digno para quienes lo perdieron todo. Esa es la cuestión