OPINION

Por Manuel Tello Zapata

Se impuso la razón

Gracias a la intervención de la Presidenta municipal de Juan R. Escudero, Elizabeth Gutiérrez Paz y dirigentes de la UPOEG, se evitó el lunes pasado un atropello más de los que acostumbra cometer el nefasto Jefe del Departamento de Secundarias Técnicas de la SEG, Alberto  Marín Chávez, quien se presentó a la Secundaria Técnica número 145, “Juan Enrique Pestalozzi”, de San Juan del Reparo, para correr a 13 maestros y sustituirlos con una nueva plantilla que ya llevaba exprofeso.

Sin embargo, su gozo se fue al pozo porque estos Maestros, profesionistas de educación superior todos, se han ganado a padres de familia, alumnos y autoridades, debido al buen desempeño de sus responsabilidades, por lo que un grupo numeroso evitó que entraran a la escuela los supuestos nuevos catedráticos, entre los que el tenebroso Marín Chávez incluyó a Gabriel Vela, un maestro que fuera expulsado de Tierra Colorada por acoso sexual contra una de sus alumnas, y después lo corrieron de El Ocotito por causas similares.

La Presidenta municipal Elizabeth Gutiérrez, y los líderes de la UPOEG le exigieron al jefe de secundarias técnicas que dejara de intrigar en esa escuela para evitar conflictos innecesarios. De esta forma, las cosas han vuelto a la normalidad en la Secundaria técnica de San Juan del Reparo, aunque los maestros temen que su enemigo gratuito Alberto Marín Chavez, cumpla con su amenaza de correrlos para meter en su lugar a incondicionales de este perverso funcionario.

A CINCO AÑOS DE SU MUERTE

Este miércoles se cumplen cinco años de que el Diputado local y Presidente de la Comisión de Gobierno, Armando Chavarría Barrera, fuera cobardemente asesinado por un grupo armado que logró darse a la fuga sin que hasta el momento se conozca bien a bien, tanto el móvil del atentado como la identidad de los responsables materiales e intelectuales.

Armando Chavarría Barrera fue un hombre destinado a lograr el triunfo en la política, que fue su gran vocación y donde se movía como pez en el agua. No consiguió uno de sus más anhelados sueños: ser Rector de la Universidad Autónoma de Guerrero, cargo para el que fue candidato y perdió porque su grupo político era más débil que las alianzas forjadas en su contra.

Sin embargo, al retirarse de la UAG, Armando se metió de lleno a hacer política en el Partido de la Revolución Democrática, donde gracias a su inteligencia, don de gentes y pluralidad, alcanzó importantes logros como ser Senador, precandidato a la Gobernatura, donde quedó en segundo sitio después de Zeferino Torreblanca Galindo, quien al tomar posesión del poder ejecutivo y como un reconocimiento a su contrincante, lo invitó a formar parte del gabinete en calidad de Secretario General de Gobierno.

En este cargo, Armando Chavarría realizó un excelente papel, con un jefe que lo estimaba pero que a la vez le imponía su presencia. En una ocasión, Armando le dijo que porqué le reducía su oficina en lugar de agrandarla y Zeferino le contestó: “No me queda duda de que tú serás el próximo Gobernador, pero ahora el Gobernador soy yo”.

Chavarría renunció al cargo porque Torreblanca Galindo le estuvo exigiendo que con su corriente apoyara a Gloria Sierra Hernández para lograr la candidatura del PRD a Presidenta municipal de Acapulco. En este sentido, Armando le dijo al jefazo de ese entonces que ellos ya estaban apoyando a César Flores Maldonado, por lo que no podía irse con Gloria. “No quiero que anden diciendo que te me rebelo y no obedezco tus órdenes, por lo que en este momento renuncio al cargo, y quiero que quedemos como buenos amigos”, le dijo, y Zeferino tuvo que aceptarlo.

Después, Armando fue diputado local y Presidente de la Comisión de Gobierno, desde donde su imagen creció a grado tal que nadie duda en que si no hubiese sido asesinado, hoy sería el Gobernador de los guerrerenses, ya que en el PRI Manuel Añorve concretaría la traición contra su primo Ángel y de todas formas sería el candidato a la gubernatura por el partido tricolor. Aguirre Rivero se hubiera hecho a un lado junto con sus miles de simpatizantes que darían el voto de castigo a favor del perredista.

Nos unimos a la familia de quien fuera nuestro gran amigo, Armando Chavarría Barrera, en la exigencia de que las autoridades esclarezcan de una vez por todas este proditorio asesinato, caiga quien caiga, que enlutó a los guerrerenses y cortó de tajo la trayectoria de un gran hombre, de un político ejemplar y un modelo de amigo, como lo era Armando Chavarría Barrera.