TUMBANDO CAÑA

Juan Antelmo García Castro

Héctor Astudillo con escaso apoyo en Tierra Caliente

Según información proporcionada por estimados lectores desde la progresista región Tierra Caliente, el pasado fin de semana el aspirante a la gubernatura de Guerrero por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), Héctor Astudillo Flores, se mostró muy irritado e intolerante debido a la escasa concurrencia que se dio cita en un salón de fiestas en Tlapehuala, abandonando la llamada “marcha del triunfo priista” a escasos metros de haberse iniciado, misma que fue organizada por líderes priistas locales…

La bochornosa huida del candidato tricolor de Tlapehuala se realizó bajo el pretexto de tener una reunión urgente en Chilpancingo, pero en realidad –aseguran algunos presente- fue debido al nulo poder de convocatoria de ciudadanos calentanos al mencionado acto de campaña, despertando la ira de Astudillo Flores ya que con aires de triunfalismo el dirigente estatal priísta, Cuauhtémoc Salgado Romero, le habría asegurado que en Tierra Caliente sería literalmente arropado por decenas de miles de simpatizantes, cuando en realidad no participaron ni mil personas en la “marcha del triunfo priista” que concluiría con un mitin en la glorieta a Los Niños Héroes, lugar en donde sólo quedó el templete erigido por trabajadores del ayuntamiento de ese municipio, como mudo testigo de un frustrado acto de proselitismo del Revolucionario Institucional, que ya se ve otra vez en Casa Guerrero.

REPRESIÓN ANTES QUE DIÁLOGO IMPERA EN EL TSJ

Hoy martes 17 de marzo se están cumpliendo siete días del paro indefinido de labores implementado por los trabajadores del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), cuyas demandas justas no son escuchadas muchos menos atendidas por la señora presidenta del Poder Judicial del estado, Lambertina Galeana Marín, dama de hierro que puntual y represivamente amenazó desde el primer día de este movimiento a los trabajadores y a sus líderes sindicales con im-partirles no justicia laboral sino la cabeza a toletazo limpio y después encerrarlos en las frías y pestilentes mazmorras de las cárceles de la entidad, o en el mejor de los casos reubicarlos en las zonas más recónditas de Guerrero, en caso de mantenerse en paro y no reiniciar sus actividades cotidianas, obviamente cumpliendo al pie de la letra las instrucciones del verdadero presidente del TSJ, Jesús Martínez Garnelo…Los sufridos trabajadores de referencia están en plantón en la flamante Ciudad Judicial, solicitando un incremento salarial del 35 por ciento para diez categorías administrativas en las siete regiones de la entidad, lo que es una petición justa y necesaria tomando en consideración que los impolutos y ejemplares magistrados del Tribunal Superior de Justicia perciben sueldos envidiables de 140 mil pesos, más bonos mensuales de 30 mil pesos por ser “buenos muchachos”, es decir, estos privilegiados jurisconsultos ganan 170 mil devaluados pero nada despreciables pesos aztecas, al mes, en tanto que los sufridos trabajadores administrativos reciben la fabulosa cantidad de 5 mil 600 pesos mensualmente. Eso es en verdad un reparto injusto del ingreso, perpetrado en México que es casi el paraíso para funcionarios favorecidos como los Galeana Marín, Martínez Garnelo, etc., quienes amenazantes reiteran a los “revoltosos” y “millonarios” trabajadores del TSJ que se ponen a chambear o “se atienen a las consecuencias”. ¿Qué tal?.