LA COLUMNA

De Ángel Irra Carceda

-A Rogelio Ortega le crecen los enanos.
-Es inminente que deje la gubernatura.
-La izquierda admite fuerza de Astudillo.

Rogelio Ortega Martínez va de mal en peor. Está a unos días de que muy probablemente le den las gracias y lo regresen a laUniversidad Autónoma de Guerrero. Y ni él ni su pésimo gabinete entendieron la gran oportunidad que desperdiciaron. La evidente carencia del oficio en las cosas del servicio público y en la conducción y operación política los desnudaron de cuerpo completo.

Resultaron ineficientes hasta la médula, y por eso es casi seguro que el día 26 de este mes al seno del Congreso del Estado designen al que habrá que concluir este gobierno estatal que inició Angel Aguirre Rivero.

Ya los cuestionamientos en su contra subieron de tono, e incluso personajes de prácticamente todos los partidos políticos se pronuncian porque deje la gubernatura que nunca debió asumir.

Claro, de donde no recibe críticas es de las filas del Partido de la Revolución Democrática. ¿Qué curioso, verdad?

Rogelio Ortega ha sido acusado, entre otras cosas, por entrometerse en el actual proceso electoral y apoyar abiertamente alPRD.

Vamos, existen serios señalamientos de que la Secretaría de Desarrollo Social del estado, se desvían recursos para respaldar las acciones de la candidata de este partido a gobernadora, Beatriz Mojica Morga.

Y no hay que olvidar que Beatriz Moja, precisamente, fue la titular de esa Secretaría. Ojo.

Y se señala directamente como el responsable de desviar recursos de la Sedesol estatal, a Jesús Mendoza de la Lama, al actual titular de la dependencia.

Jesús Mendoza colaboró con Beatriz Mojica cuando ésta fue titular de la Sedesol. ¿Qué casualidad, no?

Y ahora, le lanzó Erika Luhrs Cortés, vocera de la campaña del candidato priista a la gubernatura, Héctor Astudillo Flores, opera los programas sociales en favor del PRD y Beatriz Mojica.

La cosa va en serio, y en los próximos días se formalizará la denuncia correspondiente en la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade).

A estas alturas, a unos días de que lo echen de la gubernatura, en el circo de Rogelio Ortega le siguen creciendo los enanos.

Y en el PRD continúan preocupados porque la campaña de Beatriz Mojica, simple y sencillamente no levanta, ni con Viagra.

La cruzada que encabeza Astudillo va en ascenso. Lo saben muy bien los perredistas y en otros partidos políticos.

De ahí que ya operan para aliarse de facto el mes próximo y poder enfrentar así al abanderado priista.

Abiertamente lo admiten. Y eso, en sí, ya es una evidente botón de muestra de reconocimiento a la fuerza que ha amasado el priista en su andar por todo el estado.

Y, además, admiten la debilidad de los contrincantes de Astudillo.

Solos, cada quien por su lado, ni Beatriz Mojica ni Luis Walton tienen posibilidad de ganar ante Héctor Astudillo.

De ahí que forzosamente tendrían que aliarse.

Pero el problema es quién de los dos declinaría. Si a ambos, Beatriz Mojica y Luis Walton, los caracteriza la soberbia.

Esa alianza no es fácil lograr. Y ahí, en la jodida soberbia de los dos, es donde se darán de topes y se estancarán.