Que se elevó la compra de insecticidas por temor a Chikungunya

Entre la población existe la psicosis o temor de llegar a enfermarse por la picadura del zancudo transmisor del dengue o fiebre Chikungunya se escucha  hablar que el vecino ya tiene la enfermedad y la persona siente ya los síntomas aunque al rato se le olvide debido a que sólo fue producto de su imaginación o temor de padecer esta enfermedad.

Ante tal situación algunas personas compran sus mosquiteros, o en su caso repelentes o insecticidas para tratar de evitar el piquete del zancudo transmisor de estas dos enfermedades tropicales que están poniendo en entredicho a las autoridades de que la enfermedad se les está saliendo de control.
Por lo tanto según versión de Manuel Sánchez encargado de una farmacia, la venta de insecticidas y repelentes contra moscos, se ha disparado hasta en un 40 por ciento, derivado del temor de la población por contraer la fiebre Chikungunya, por lo que decenas de negocios han salido beneficiados, en tanto también hay pobladores que usan métodos tradicionales para alejar a los insectos.
Agregó el encargado de farmacia, que las ventas han aumentado como en un 30 por ciento, “al final del día se hace el corte de caja y se dan cuenta de que fue lo que más se vendió”.
Añadió que a los consumidores se les recomienda que lean las instrucciones porque no es un medicamento controlado, consideró que se venden más repelentes contra insectos porque los insecticidas son más caros y llegan a los 40 pesos, mientras que los repelentes están entre 15 y 20, según la marca y tamaño.
Menciono que hay suficiente producto para la venta que se está teniendo en la ciudad, por lo que se espera que se continúe la compra de los productos insecticidas que están siendo muy solicitados.
Mientras que la gente pobre  en algunos lugares  continúa utilizando la manera tradicional para alejar los moscos, según Moisés Talavera, de la colonia La Noria, hay métodos tradicionales que se usaban hace años, y en algunos hogares se continúan empleando.
Explicó que se usa desde la cascara seca de coco para hacer humo, también el excremento de la vaca es quemado con el objetivo de alejar los moscos, esto, dijo se emplea en las casas de las personas que son de bajos recursos económicos al no tener dinero para comprar un bote de insecticida que llega a costar hasta 40 o 50 pesos.

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