El Filósofo De Güémez

…¡Te coge el toro!

Por Ramón Durón Ruíz

La hermosa frase dice: “Si un huevo se rompe por una fuerza exterior, la vida termina; si se rompe por una fuerza interior, la vida comienza. Los grandes cambios de tu vida empiezan de adentro hacia fuera” Eso lo sabe y también lo siente Adela Micha, quien vive cada día desde el poder que anida adentro, con las 12 E’s: Energía, Entusiasmo, Empatía, Elevada Estima, Eficacia, Eficiencia, Encanto, Elocuencia, Excelencia, Entrega, Equilibrio, Emociones Positivas, que en conjunto la convierten en una mujer plena de valores, carismática, respetada, querida, exitosa… líder  en la comunicación social.

Una muestra del enorme liderazgo del que Adela Micha goza, se dio en el Coso Monumental de Aguascalientes, durante la décima segunda corrida y décimo tercer festejo de la CLXXXVII Edición, de la Feria Nacional de San Marcos, en donde en el tercer tercio de su lidia, el torero anfitrión Mario Aguilar, le brindó el primer astado a Adela, como símbolo de afecto y reconocimiento.

Adela es una mujer de la cultura del esfuerzo, comprometida con el trabajo duro, en su larga carrera ha construido afectos y éxitos, por una razón sencilla, a la vez que omite la arrogancia, el orgullo y la soberbia, trabaja duro, vive en la frecuencia del amor incondicional a su familia, piensa en positivo, disfruta su paz interior, aprovecha cada oportunidad, porque sabe que el tiempo sirve para construir su historia.

La dedicatoria para Adela, del primer toro de Mario Aguilar, fue recibida con aplausos y beneplácito por el “respetable”, que está lleno de sabiduría, que entre cada pase, veronicas, molinetes, vitolinas, manoletinas y olés, sacan a relucir el ingenio popular, en ocasiones a través de palabras plenas de genio en otras de voces huérfanas y non santas.

El tendido en la “Fiesta brava” se convierte en una escuela de vida, es un sitio para la catarsis empirica colectiva, en un lugar para la reflexión, la amistad, el diálogo, la sana diversión, en donde la adrenalina, como las emociones  –como el peso… suben y bajan– corre a raudales, convirtiendo a la “Fiesta brava” en un espacio de refugio, de espera, de amistad, de inigualable fraternidad.

La Feria Nacional de San Marcos, se ubica entre las de más prestigio del mundo, al lado de la de San Isidro, Malaga, San Mateo, San Fermín, Pamplona, La Plaza México, Texcoco, Huamantla, León, etc.

Una plaza de toros es un lugar donde se juega la vida y el honor, es una auténtica escuela de valor y de vida, en donde a la par que se abreva la cultura popular, florece la interrelación humana al calor del arrojo del oficio taurino, de la camaradería y la amistad.

Ahí, desde las gradas se rompe el hielo de la frivolidad y la inercia, se usa el libre albedrío, a la par que el torero se esfuerza en plasmar su valor y su arte, de entre el publico brotan de manera más que espontánea un próvido venero de divertidas, eficaces y saludables voces, de lenguas sanas, vivas y a veces desgarradoras, que a través de vericuetos se llega a las entrañas de una parte de nuestra cultura popular. 

Para el Filósofo de Güémez el arte de la tauromaquia es como la vida, a veces con determinación trasmites tu pasión y cuajas una faena plena de tu arte y tu temple, con excelsos naturales, con un toreo pleno de adornos de mucha torería, aterciopelado, cadencioso, llevando bien metido en el engaño al astado, entonces hay palmas, en otras ocaciones oreja, vueltas al ruedo, rabo, salidas en hombros, indultos, pero a veces… ¡TE COGE EL TORO!.