Memorándum

*** El agradecimiento Astudillista

Por Gerardo Ruano Cástulo
Los asistentes se pusieron de pie. El auditorio se cimbró con los aplausos. Fue una exposición impresionante. El ponente lucía una enorme sonrisa de satisfacción. Cuando bajo del escenario, detrás de cámaras, al encontrarse con su jefe, esperaba una felicitación. Entonces la respuesta fue inesperada: “estuvo terrible tu ponencia. No me convenciste”.

Molesto por el comentario, el ponente le dijo a su jefe: “Tengo tres palabras para ti”, y después de una pausa, se las soltó: “Vete al demonio”. No era para menos. Había trabajado por días en el proyecto que presentó. Se trataba de un plan ambicioso del mundo de la tecnología y la presentación impactó a lo más selecto de sus clientes. Era obvio, que en breve, ya puesto en marcha el nuevo proyecto, los millones llegarían a las arcas de la empresa.
Por esa razón, se reunió con su equipo para felicitarles y reconocerles el apoyo. Y una vez, picado en su orgullo, les informó que prepararan sus cosas, porque se iban dos días de descanso a un hotel exclusivo en un buen destino de playa. Les dio una merecida recompensa. En el lugar, la atención fue de primer nivel. Al final de la estancia, cuando le pasaron la nota al brazo derecho de aquella empresa, llamada Apple. Solamente dijo: “Póngala de favor, en la cuenta de Steve Jobs”.
Cuando regresó al trabajo y se entrevistó con el hombre que revolucionó la industria de la tecnología, Steve Jobs, éste no lucía molesto, se veía serio, como la mayoría de las veces. Así que esperaba todo tipo de discurso. Sin embargo, no fue de esa manera. El gran líder, solamente le expresó: “Tengo dos palabras para ti”. Después de una pequeña pausa, dijo: “GRACIAS AMIGO”.
Los grandes líderes hacen dos cosas muy bien. La primera de ellas, como saber motivar a su gente. En ocasiones, no es en base al elogio o aplauso fácil. En la mayoría de las ocasiones, es picándoles el orgullo para que no sean conformistas. La otra, es la de ser SIEMPRE AGRADECIDO. Bien lo dice Wayne Dyer, en su libro el poder de la intención, que el agradecimiento es la mejor forma de conectar con la fuerza más grande del Universo.
Desde esa perspectiva, creo que el Gobernador Electo de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, sabe de esos ingredientes del liderazgo. Y tan lo sabe, que su primera acción, después de la jornada electoral del primer domingo de junio, ha sido AGRADECER el apoyo de su equipo, estructuras y ciudadanía en general.
En medio de la situación complicada que se vive en la entidad, es importante el poder del agradecimiento, porque esto fortalece los lazos entre la gente, y más allá de hablar bien solamente del Gobernador Electo, es uno de los caminos que conduce a la consolidación de las bases para traer a Guerrero el orden y la paz.
Creo que Astudillo Flores sabe bien de lo que se trata. De la calidad de liderazgo que se necesita en el estado. Puesto que no basta con haber ganado la elección. Lo que se impone, es el trabajo de un líder que tenga un equipo con talento, al que sepa estimular y al que también motive con el poder del agradecimiento.
Hoy, ha mostrado que tiene bien claro el camino. Que es un líder con los atributos para buscar regresar la tranquilidad a los guerrerenses. Sabe, y lo sabe muy bien, sobre el poder que tiene el agradecimiento. Por eso, ha emprendido una muy buena gira por las regiones de la entidad Esa es la cuestión.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario