Asume la parroquia de San Miguel Arcángel, de Coyuca de Benítez, el párroco Nicolás Orbe de la O


Por Alberto Solís Loeza
Coyuca de Benítez, Gro.-Entre muestras de gratitud, aprecio y fe, cientos de fieles católicos provenientes del municipio de Igualapa, región de la Costa Chica, este jueves le dieron la despedida a su guía religioso y responsable del santuario de Nuestro Señor del Perdón; el tecpaneco Nicolás Orbe de la O, quien desde este día ocupa la parroquia de San Miguel Arcángel, en esta ciudad de la Costa Grande. 

Con danzas regionales y música de viento, los feligreses de ese municipio costachiquense, recorrieron junto a otros cientos de seguidores de la iglesia católica de Coyuca de Benítez y de sus comunidades, las calles principales de la ciudad, engalanadas para recibir a su nuevo pastor. 
Durante la misa de recepción oficiada por el sacerdote de la parroquia de San Bartolomé Apóstol de Tecpan de Galeana, Emmanuel Villalobos Luna, delegado del arzobispo Carlos Garfias Merlos; el nuevo párroco de la principal iglesia de Coyuca de Benítez, Orbe de la O, recibió las llaves del templo católico, el campanario y la bendición sacerdotal para que guie por buen rumbo a la feligresía de esta región. 
Al término de la ceremonia litúrgica, el padre Nicolás Orbe de la O destacó que se sentará a dialogar con todos los sectores y grupos de la sociedad de Coyuca de Benítez, “tratando de construir la paz que tanto necesitamos los guerrerenses”, dijo, al momento de agradecer las muestras de cariño de la gente de Igualapa, lugar donde se entregó en “cuerpo y alma” por más de 8 años. 
Reconoció también el apoyo que recibió de las autoridades de Igualapa y agregó que ahora sigue “otro momento de servicio. El Papa Francisco nos ha invitado a todos los ministros a ejercer el sacerdocio como una tarea de servicio, estar al pendiente de las personas que más necesitan de nuestro apoyo, en especial los niños, los jóvenes, los ancianos y los desprotegidos”. 
Añadió que su tarea además “es la reconstrucción de la justicia y de la paz, una tarea de toda la arquidiócesis y en la que también hemos de trabajar en Coyuca de Benítez, para mí como sacerdote es otra manera también de trabajar por el pueblo de Dios y acompañarlo”. 


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