Tumbando Caña

¿Premonición, maldición o represión de Javier Duarte?

Juan Antelmo García Castro
Ha trascendido en algunos medios de comunicación que durante una reunión con la prensa jarocha, en junio pasado, el gobernador de Veracruz Javier Duarte lanzó temerarias acusaciones contra periodistas locales de presuntamente tener vínculos con la delincuencia organizada, pronosticando que esos nexos podrían traer como resultado represalias por parte de los delincuentes…
Al mes de haberse realizado esa reunión prensa-gobierno estatal, el fotógrafo veracruzano que laboraba en los influyentes medios periodísticos Cuartoscuro y Proceso, Rubén Espinosa Becerril, fue asesinado brutalmente junto con cuatro mujeres en un departamento de la Colonia Narvarte, en el Distrito Federal, la noche del viernes pasado; condenable crimen que desencadenó inmediatamente una ola de protestas de comunicadores por todo lo largo y ancho del país, exigiendo justicia y señalando como responsable de la muerte del colega Rubén Espinosa, al mandatario estatal veracruzano, Javier Duarte…”La delincuencia tiene nexos, tiene puentes (...) Lamentablemente, algunos de los colaboradores, trabajadores de los medios de comunicación tienen vínculos con estos grupos y también están expuestos a esta situación (…)  ¿Qué les quiero pedir, compañeras y compañeros? Y se los digo por ustedes, por sus familias, pero también por mí y por mí familia, porque si algo les pasa a ustedes al que crucifican es a mí... Pórtense bien, todos sabemos quiénes andan en malos pasos. Todos sabemos quiénes de alguna u otra manera tienen una vinculación con estos grupos. Que nos hagamos como que la Virgen nos habla es otra historia, pero todos sabemos quiénes tienen vínculos y quiénes están metidos con el hampa. Pórtense bien, por favor, se los pido (…) Vamos a sacudir el árbol y se van a caer muchas manzanas podridas. Yo espero, verdaderamente se los digo de corazón, que ningún colaborador, ningún trabajador de los medios se vea afectado por esta situación y solamente se van a ver afectados quienes de alguna u otra manera tienen vínculos con estos grupos criminales. No hay que confundir libertad de expresión con representar la expresión de los delincuentes a través de los medios”…Entre otras recomendaciones, eso fue lo que Javier Duarte expresó a los periodistas en junio de 2015; sin embargo, Rubén Espinosa Becerril habría denunciado pública y oportunamente que recibió amenazas en Veracruz y temiendo por su integridad física tomó la prudente decisión de cambiar su residencia a la ciudad de México, hace casi dos meses, hasta donde la muerte lo persiguió feroz e implacablemente.
ATENTADO TERRORISTA CONTRA PERIÓDICO EN VERACRUZ
Para no perder la costumbre de “tírenle a la prensa”, en la madrugada del domingo pasado la parte frontal del edificio que alberga al diario Presente de la ciudad de Poza Rica, Veracruz, sufrió un atentado a balazos por individuos desconocidos con armas de grueso calibre, además de incendiar la camioneta de Jesús Villanueva, director general y dueño del rotativo en desgracia, quien denunció que fueron alrededor de siete sujetos los autores, mismos que llegaron en camionetas y en motos a las oficinas del periódico aproximadamente a las 5 de la mañana. ¡No disparen, soy periodista!.

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