OPINION

Del dicho al hecho…

Por Manuel Tello Zapata.
Gran sorpresa se llevaron los militantes de la corriente perredista “Grupo Guerrero”, cuando en su asamblea de refundación apareció la figura del Gobernador del Estado Rogelio Ortega Martínez, quien atendió una invitación del Diputado federal por Michoacán, David Jiménez Rumbo, con quien se conocen desde los tiempos en que ambos hacían política al interior de la Universidad Autónoma de Guerrero. De esta forma, el mandatario interino hizo uso de sus derechos políticos y se puso de manera abierta la camiseta del PRD. Al realizarse la asamblea en día domingo, no laborable, tenía todo el derecho de asistir.

Rogelio Ortega ha sido un hombre de izquierda toda su vida. Esa ideología lo ha llevado a identificarse con el PRD, donde militan muchos de sus amigos. Sin embargo, su presencia y participación en la asamblea para refundar a la corriente ex chavarrista “Polo Guerrerense de Izquierda”, (Armando también fue un gran amigo de Ortega Martínez) causó gran controversia al otro día; especialmente por pronunciar una frase de felicitación que le expresó al Alcalde electo de Acapulco: “Me da gusto que esté Evodio, con quien ganamos Acapulco”. 
Diversos dirigentes de otros partidos políticos, especialmente del PRI, argumentaron que lo dicho por el Gobernador interino era una prueba de que durante la campaña había apoyado a Evodio con recursos económicos, lo que podría convertirse en un delito electoral. Sin embargo, la frase fue más bien producto del entusiasmo generalizado que contagió al Doctor Ortega, quien expreso la famosa frase como lo hubiera hecho cualquier militante del PRD.
Si Evodio hubiera sido apoyado con recursos por el Gobernador, su victoria hubiese sido clara y contundente. Esto no sucedió porque el candidato perredista le ganó al Doctor Terán Porcayo por menos de dos mil votos en el recuento final, lo que significa la contienda por Acapulco más cerrada en muchos años. De partido a partido, el PRI superó al PRD por más de nueve mil votos, pero el PT, aliado perredista, obtuvo doce mil sufragios y con eso se fue adelante Evodio. Los que manejan al Partido Verde Ecologista se negaron a ir en alianza con el PRI, porque le vendieron la candidatura al hoy famosos cazador de tiburoncitos, conocido como “el Jacco” (?). Si este acto de corrupción entre los del Verde Ecologista no se hubiera dado, con los siete mil votos de este partido, hoy el PRI sería quien gobernará Acapulco.
Mucho se habló en los últimos días sobre que los abogados del partido tricolor preparaban una demanda ante la FEPADE contra el Gobernador  Ortega Martínez, por presuntos delitos electorales. Sin embargo, difícilmente podrían probar con la frase señalada, que Rogelio le soltó la lana a Evodio. Además, el PRI ganó de manera arrasadora en los comicios pasados con el “efecto Astudillo”, por lo que en realidad no se observan muchas ganas de hacerla de tos, como si lo hacen los Chuchos y Beatriz Mojica Morga, que respiran todavía por la herida. Las cosas finalmente quedarán en un ambiente tranquilo, con olor a “calladito te ves más bonito”. Punto. 
PROGRAMA FIRME.
La polémica que se suscitó en torno a que el Gobierno del Estado no entregaría en el 2015 los uniformes escolares gratuitos para el alumnado guerrerense, ha quedado aclarada en tiempo y forma por la Dirección General de Comunicación Social. Debido a que el nuevo ciclo escolar comenzó apenas el pasado lunes, los directivos de las escuelas no han enviado las tallas de sus alumnos, por lo que no se pueden entregar los uniformes.
Sin embargo, está asegurada esta, porque existe un presupuesto etiquetado para ejecutar dicho programa, que es un apoyo para las familias, especialmente para las más vulnerables. Entre la clase media y población urbana, muchos padres de familia ya adquirieron los uniformes, pero en las zonas más empobrecidas, que casi es todo el Estado, los alumnos van a recibir clases sin estos, con el permiso expreso de directores y maestros en general. Pero finalmente recibirán los uniformes como un apoyo del Gobierno del Estado.
UN CAMBIO ANTICIPADO.
En nuestra columna  publicada el pasado 25 de agosto escribimos. “Luego del buen trabajo que ha desarrollado Cuauhtémoc Salgado Romero al frente del Comité Directivo Estatal del PRI, en los próximos días solicitará licencia para retirarse del cargo, ya que a mediados de septiembre debe incorporarse al Congreso local, como integrante de la fracción priísta. En su lugar se nombrará a un encargado del despacho, que seguramente será el actual delegado del CEN priísta”.
Dicho comentario se concretó el pasado miércoles cuando asumió la dirigencia estatal priísta el delegado José Parcero López, quien asume el mando tricolor en forma interina hasta que se realice el cambio de la manera acostumbrada y mediante la convocatoria respectiva. La realidad es que se van a esperar a que el Gobernador electo Héctor Astudillo Flores, tome posesión del cargo con lo que se convertirá en el primer priísta del estado, como se acostumbra al interior del PRI. La designación del próximo dirigente estatal dependerá directamente de dos personajes: Héctor Astudillo Flores y Manlio Fabio Beltrones. La figura que más se perfila para ocupar dicho cargo, en base a los acuerdos previos de la cúpula estatal, es la del Alcalde saliente de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos.

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