MEMORÁNDUM

*** Alta competencia en Tixtla, entre PRI y PRD.

Gerardo Ruano Cástulo
Era de las plumas más leídas, por esa razón, cuando el gobernante leyó las críticas que vertía sobre él, le mandó llamar de inmediato. Se hablaba de que entre ambos existía una gran amistad, por esa razón, el mandatario se sentía sorprendido, y hasta traicionado.

El escritor no tuvo ningún inconveniente en reunirse con el amigo. Ya sentados a la mesa, escuchó al gobernante que lucía sumamente molesto. Entonces, el escritor, hombre conocido por su grandiosa habilidad, le dijo lo siguiente: “Amigo, ¿Tú has confiado en lo que escribo?”, la respuesta fue un sí.
Entonces, indicó: “Si es así, déjame decirte, que si la gente lee en mis escritos críticas hacia tu forma de trabajar, también aceptará con agrado, las cosas buenas que escriba de ti. Y la credibilidad hacia tu gobierno se incrementará”. (Tomado de un libro para el crecimiento humano).
La historia anterior, nos sirve como marco para hablar de las elecciones del próximo domingo en el municipio de Tixtla. De entrada, es evidente el grado de competencia que ha tomado la contienda. Se nota en los ataques de los partidos que más posibilidades tienen de ganar. También, la lucha llega hasta los medios, donde se palpa la parcialidad.
Los antecedentes hablan, de un PRI, que sabía de la situación complicada de la elección. La lectura adecuada a los hechos violentos de la jornada de junio, tuvo a punto de convertir a Saúl Nava Astudillo en alcalde, porque en un proceso normal, sin incidentes, el triunfo, de acuerdo a los números que conocían en ambas trincheras, es que Hossein Nabor Guillén habría ganado con un buen margen de diferencia.
Después de la derrota perredista por la gubernatura, el PRI ha echado gran parte de la carne al asador, para buscar revertir las tendencias, que al inicio del proceso extraordinario, aún ponían al frente a Hossein Nabor, sobre quien se parecen haber centrado gran parte de ataques, porque se sabe que es él, el candidato, la fortaleza más fuerte que tiene el PRD.
En tanto, por el lado del PRI se juegan mucho. Saúl Nava Astudillo es ubicado como “candidato” del diputado local, Cuauhtémoc Salgado, quien no contó con el aval para coordinar a la fracción de su partido. Y ahora, después de haber fungido como líder estatal de su partido, le vendría muy mal un descalabro. Como también, a quien no le ayudaría una derrota, es al ex alcalde de Chilpancingo, Mario Moreno Arcos, al que también, junto con su equipo, se ha visto trabajando arduamente para la causa priista. De hecho, hay quienes dicen, se juega su próxima asunción al Comité Directivo Estatal del PRI.
Desde esa perspectiva, es entendible el alto grado de presión. Hossein Nabor carga sobre  sus hombros los yerros que ha cometido el PRD. Más, en el papel, es quien menos tiene que perder. Sí mucho que ganar. De hecho, si gana el PRI, habrá funcionado todo el trabajo del equipo de apoyo, aunque le llamaría de rescate. Pero si gana el PRD, que es una posibilidad latente y posible, el candidato será la gran diferencia.
Así está, la alta competencia por el municipio de Tixtla. 
EN EL AYUNTAMIENTO capitalino, quien hace un magnífico trabajo y aporta con su gran don de gente, es el secretario particular, Alfredo Rodríguez Córdoba. 
Es un hecho, que quienes acuden a la presidencia municipal, se encuentran con un funcionario atento, amable y con gran disposición al servicio. 
Fredy, como se le conoce en el ambiente, se distingue por su gran calidad humana. De ahí, que es una excelente designación, el cargo que hoy tiene bajo su responsabilidad. Esa es la cuestión.

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