MEMORÁNDUM

*** Gobernador y líder del SUSPEG, en la misma ruta de trabajo. 

Gerardo ruano cástulo.

Ahí estaban sentados en los vestidores, después de haber logrado el campeonato. Eran los dos mejores jugadores de la liga y de aquél país. El triunfo lo habían conseguido, en virtud de la magnífica comunicación que había con el equipo, y especialmente entre ellos, que eran unos delanteros fuera de serie.

La gran mayoría de los goles, eran producto de su calidad. Un binomio impresionante. Las defensivas contrarias sufrían ante la suma de tanto talento. Ahora, ya en la tranquilidad de aquella banca. Ambos reflexionaban: “Te das cuenta de lo afortunados que somos”. A lo que el otro respondió: “Si, la gente nos quiere. Los niños nos admiran. Y mira, hoy somos los campeones.”

Ante eso, el primero en hablar, dijo: “No me refiero a eso, sino al poder más grande del universo, que ha hecho posible todo esto. Especialmente, que hizo posible, el que ambos estemos viviendo en la misma época, en el mismo país y juguemos en el mismo equipo.”

“Pudimos haber nacido en tiempos distintos. Más alguien quiso que naciéramos en la misma era. Y lo mejor de todo, es que nuestros talentos se estén sumado para dar mucha alegría a nuestra gente.” (Del taller de la imaginación de Juan Francisco R.)

Efectivamente, la armonía que existe en el universo no es casual. Mucho menos, que vivamos hoy en ésta era, llamada de la comunicación. Todo tiene una razón de ser, como el hecho, de que hoy en el ambiente político, coincidan en el trabajo, el Gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, y el Líder Estatal del SUSPEG, Adolfo Calderón Nava.

Por lo visto, durante la sesión del Congreso Suspegista, donde rindió su segundo informe de trabajo, Adolfo Calderón, la relación que existe entre Sindicato y Gobierno del Estado, es de un grado magnifico. La confianza del líder para entregar el pliego petitorio al mandatario estatal en ese escenario, es una muestra elocuente de esto.

Mejor aún, la postura del Gobernador Héctor Astudillo, al romper todos los protocolos y hablar de manera llana a los integrantes de los órganos de gobierno del SUSPEG. Con un lenguaje pues, como se hablan los amigos. De manera franca, directa y sin palabras rebuscadas. Demostrando con hechos, que es el aliado más fuerte que tienen los trabajadores.

Lo que se vivió en el SUSPEG, fue la confirmación de una relación de tintes extraordinarios, en donde más allá de los aplausos y las luminarias, lo que buscan, tanto el Gobernador como el líder, es dar más alegrías a la base trabajadora.

El punto es, que Adolfo Calderón signó este compromiso aduciendo la voluntad de ir construyendo por la vía del dialogo, la tolerancia y el respeto. Por su parte, el Gobernador Héctor Astudillo, lo hizo retomando el slogan de su gobierno, Guerrero nos necesita a todos, puntualizando que en esa ruta, él hará su parte como mandatario estatal. De hecho, como lo ha estado haciendo, en los diferentes rubros, como ahora sucede con el caso de pagos de fin de año y aguinaldos. Y en su momento, dando respuesta puntual a cada punto del pliego petitorio.

La sincronización del destino, que hoy pone en la misma ruta de trabajo al Gobernador de Guerrero y al líder del SUSPEG, es una magnífica noticia para miles y miles de trabajadores del sector central, magisterio estatal y organismos públicos descentralizados.

POR CIERTO, alguien que mantiene un buen ritmo de trabajo, aportando para bien del municipio capitalino, es el regidor de obras, Julio Morales Díaz, a quien recientemente se le vio supervisando los trabajos de pavimentación en la colonia “El Polvorín”. Esa es la cuestión.