ZONA CERO

Nefastas herencias 

Roberto Santos

Quejas en contra de Urbano Lucas, perredista rector de la Universidad Intercultural del Estado de Guerrero, quien no paga los salarios ni aguinaldos a los trabajadores administrativos y académicos, pese a que la ley marca que en diciembre se deben cubrir los primeros y tampoco hay razón para que no pague las quincenas.

A algunos trabajadores le ha dicho que nos les va a pagar y que le hagan como quieran, insinuando que si quieren lo demanden, pues él ya se va. Es decir, parece pretender no pagar, y dejar un problema a la administración de Héctor Astudillo, reflejado en demandas laborales, que pronto se convierten en sumas millonarias a pagar.

Un comportamiento de este rector dice mucho de la falta de honorabilidad, honestidad, y responsabilidad, porque no es su dinero ni es su escuela, a la que pretende manejar con grillas de grupo; de su tribu perredista, por cierto. 

Los trabajadores quejosos sospechan de un mal manejo de recursos y que la intención del rector es presionar y hostigar a éstos para que renuncien y pueda contratar a nuevos para darles empleo a integrantes de su grupo, ahora que se encuentran de capa caída al perder la gubernatura. 

La verdad es que las autoridades de gobierno ya deberían intervenir y proteger los derechos de los trabajadores de esa institución que se encuentra en La Ciénega, del municipio de Malinaltepec, y realizar una investigación a fondo de este perredista que no logra entender que el paraíso de Ángel Aguirre y de Rogelio Ortega, lleno de abusos, impunidad y valemadrismo ya no existe más, por lo tanto debería renunciar para irse con sus patrones que ahí lo pusieron.

Otra nefasta herencia de anteriores gobiernos es la que dejaron en la Secretaría de Salud, a quien muchos de los trabajadores ya no soportan es Olivia Hidalgo, a quien señalan de prepotente, altanera, y déspota. 

La solicitud que hacen algunos trabajadores de esta dependencia de salud es que les quiten a esta persona como jefa de, porque es abusiva con ellos, y citan el caso de la señora que realiza acciones de limpieza “a la encierra en un cuarto con la mirada pegada a la pared, como si de su hija se tratara.” Y eso que en el discurso se maneja como feminista y es parte de algunos grupúsculos que solo usan ese discurso para acceder al poder, aunque en realidad sea más misógina que cualquier hombre machista.