MEMORÁNDUM

*** La libertad de elegir.

Gerardo Ruano Cástulo
Saítam veía que los demás niños se divertían, mientras él trabajaba. La alegría de los pequeños tras la pelota era palpable. De pronto, la esférica llegó hasta donde llenaba la cubeta de arena. El que fue por ella le preguntó: “¿Qué haces amigo?”. Él respondió: “Estoy ayudando a mi papá. Necesita que le acerque la arena para que construya un muro de la casa”. 

El pequeño le dijo: “¿Quieres venir a jugar con nosotros?”. “Me gustaría. Pero eso será cuando termine de pasar toda la arena donde la necesita mi papá.”. No hubo más insistencia. Regresó con la pelota para continuar el juego. 
Pasado un tiempo, salió el papá de Saítam a buscarle. Ya andaba entre los demás niños jugando alegremente con la pelota. Al verle, le gritó: “¡Hijo, ven acá!”. Saítam corrió a verle y detrás de él los demás pequeños. Entonces, el padre le cuestionó: “¿Por qué estás jugando en lugar de hacer lo que te pedí?”
Todos los niños rieron ante la pregunta. Lo que molestó un poco al señor, quien dijo: “haber, ven para acá conmigo”. Saítam le dijo: “No te molestes papá. La arena ya está donde la necesitas.”
El señor volvió la mirada y se dio cuenta de que era cierto. “Mis amigos, dejaron de jugar un rato, fueron por cubetas y me ayudaron a pasar la arena, para que jugara con ellos.” (Del taller de la imaginación de Juan Francisco R.) 
Con motivo del mes del niño, es bueno recordar todo lo que nos aportan los pequeños. En ellos no hay egoísmo, ni mezquindades. Eligen libremente ayudarse. Se divierten haciendo las cosas en equipo. En tanto, cuando nos volvemos viejos nos invade la indiferencia. Actuamos de manera mezquina. Perseguimos otra clase de intereses. Es una loza el trabajo y acciones en equipo.
El punto es, que hablar de los atributos de los niños es grandioso. Soy de los que creo, que Jesús decidió llegar al mundo por medio de un vientre materno, “porque no quiso perderse la oportunidad de ser un niño”.
En apego a la historia que compartimos en ésta entrega, es genial cuando el ser humano elige libremente. Sin hacer caso de prejuicios o presiones. En el ámbito político, es buena la democracia. Especialmente, por el derecho que tiene la ciudadanía a votar y ser votado.
Si bien aún persisten vicios, se ha logrado avanzar en la elección libre. A esa realidad no se escapa en el SUSPEG, en donde los nuevos tiempos hablan de una cultura de respeto a la libertad de elegir. Por más esfuerzos que hagan, quienes aspiran a un cargo de dirigencia, de vender una imagen por su buena relación con algunos funcionarios, eso no garantiza nada. La base sabe que su voto es el que vale y generalmente se le da a quien ha colaborado a pasar la arena. Es decir, a quien se la ha jugado con ellos a nivel de tierra.
Adolfo Calderón Nava ha construido una magnífica relación con el Gobernador Héctor Astudillo Flores, en función del trabajo. Y en una gran coincidencia: ambos respetan profundamente la voluntad ciudadana.
Hoy se vive un proceso electoral en la sección 31 del SUSPEG, que aglutina a la mayor parte de trabajadores administrativos del COBACH. En el que, por ese respeto a la libertad que hoy se respira, se vislumbran enormes posibilidades de triunfo para la planilla Rosa, encabezada por Yadira Orozco Zuñiga. No es fortuito. Ha trabajado en equipo para pasar la arena. Ha ganado importantes consensos. Su candidatura no es una ocurrencia. Se registra, en virtud de una gran suma de voluntades.
Faltan días para la jornada electoral. Más sin embargo, su mayor fortaleza es estar ahí, en donde había que pasar la arena, y no en busca de padrino político.      
EN EL ÁMBITO MUNICIPAL, Guillermo Reyes Villela, titular de Desarrollo Social, se sigue distinguiendo por su forma sencilla de relacionarse con la gente. Sin duda, esa parte de gran valor humano, hace posible que los programas y acciones lleguen a quienes verdaderamente lo necesitan. El punto es, que ahí hay un amigo y aliado de la gente. Memo, Villela, como le conocen, es un funcionario que escucha, atiende y siempre accesible. Esa es la cuestión.

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