MEMORÁNDUM

*** Respeto; como clave de éxito.

Gerardo Ruano Cástulo.

El lugar estaba casi vacío. Solamente había unos cuantos espectadores. El Gerente de la empresa dio la orden de cancelar la función y devolver las entradas. El teatro había ofrecido un espectáculo circense de gran calidad, pero al parecer, muchos no lo habían creído o les parecía indiferente. Entonces, la baja asistencia, había puesto de malas al Gerente.

Ya iba el anunciador a dar la noticia a los asistentes, cuando de pronto, los artistas llegaron para decir algo: “Creemos que la función se debe llevar a cabo”.

El Gerente, no muy convencido escuchó: “No debe pagarnos por la función de hoy. Lo haremos sin salario alguno”. Eso le arrancó una gran sonrisa, para después agregar: “será un ensayo en vivo”.

“No”, le dijeron los artistas. “Será el mejor show que hayamos dado. Será el mejor, porque respetamos a quienes hoy han venido. Y porque ellos, les dirán a los de allá afuera, que vale la pena venir a ver nuestro trabajo.” (Del taller de la imaginación de Juan Francisco R.)

Es cierto, tal y como lo leí hace algún tiempo, en un libro sobre ventas: “La clave del éxito radica en el respeto a los clientes”. Creo que lo mismo opera para todos los campos de la vida.

Esa palabra: Respeto. Es la base, donde hoy se finca la magnífica relación entre Gobierno del Estado y SUSPEG. Hasta donde tengo entendido, lo que inclinó la balanza de la gran mayoría de Suspegistas, a favor de la candidatura del actual Gobernador, Héctor Astudillo Flores, es porque les ofreció, antes de todo, respeto.

Mientras, que quienes pasaron de noche por el gobierno del estado, buscaron el respaldo por medio de la presión y el chantaje. Lo que anticipaba un escenario negativo. Una mala señal, por la falta total de respeto al SUSPEG, sus liderazgos y la base trabajadora.

Sí, efectivamente, la relación de amistad entre el Gobernador Héctor Astudillo Flores, y el líder estatal del SUSPEG, Adolfo Calderón Nava, se ha fortalecido. Y es así, por la misma relación de respeto. Ambos están comprometidos en la ruta del trabajo. Como también, en respetar a los trabajadores de todos los ámbitos del gobierno.

El SUSPEG no es un sindicato sumiso. Es un actor que trabaja a favor del desarrollo. Y que, cuando se pierde esa línea de respeto, sabe emprender acciones. Lo hizo por el bono de fin de periodo de gobierno. Lo hacen sus secciones sindicales. 

Siempre en apego a la responsabilidad. Las labores no se suspenden por capricho, sino porque existe una razón de peso para hacerlo. Pero especialmente, cuando el respeto se ha dejado de lado.

Creo que el Gobernador Héctor Astudillo Flores lo ha manifestado siempre. Su llamado es al respeto y al trabajo. De la misma forma, el líder del SUSPEG, Adolfo Calderón Nava, le apuesta a trabajar, para aportar en bien del estado; y a transitar por el camino del dialogo y tejido de acuerdos. Por eso hay una gran relación.

QUIEN TAMBIÉN TRABAJA, con una línea muy buena de respeto a la gente, es el titular de la Secretaría de Asuntos Indígenas, Gilberto Solano Arreaga, quien por esa misma razón, labora a ras de piso. Constantemente, en contacto con la población que le corresponde atender, y desplegando acciones que hagan sentir más la mano del gobierno en los municipios. Esa es la cuestión.