TUMBANDO CAÑA

Si otros endeudaron a Acapulco, ¿Yo por qué no?

Juan Antelmo García Castro
El alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre, se mantiene terco en obtener un empréstito por 158 millones de pesos, bajo el argumento de que si sus antecesores Manuel Añorve Baños (PRI) y Luis Walton Aburto (MC), en sus respectivos periodos solicitaron millonarios créditos bancarios y dejaron endeudado al puerto bello, a él por qué le impiden hacerlo, incurriendo en una contradicción inexplicable pues mientras por un lado presume a los cuatros vientos que su Administración goza de finanzas sanas, por el otro pretende ejercer un presupuesto pro déficit, exhibiéndose o bien como mentiroso o como un pésimo administrador pues ¿quién en su sano juicio pide dinero prestado cuando está haciendo alarde de envidiable solvencia económica?, aunque en corrillos de Palacio Municipal dicen que en 10 meses de haber asumido la alcaldía, Evodio Velázquez Aguirre ya lleva un déficit acumulado de 378 millones de pesos.
¿Será?…Ahora bien, el pueblo porteño y el guerrerense en lo general deben estar agradecidos de la negativa aplicada a la Comuna de Acapulco por parte del Congreso local, ante la necedad de querer endeudar aún más al referido municipio turístico, pues con esa medida legislativa se establece un precedente histórico para que de ahora en adelante ningún presidente municipal, del partido que sea, principalmente aquellos que pobres entran y millonarios salen, soliciten líneas de crédito a instituciones bancarias usureras con el pretexto de que esos recursos serán etiquetados para realizar “obras sociales, de infraestructura física y proyectos productivos”, cuando en muchos casos son utilizados discrecionalmente para otros fines, incluso hasta enriquecimiento ilícito, condenando a los ayuntamientos al endeudamiento impagable cada tres años…En actitud retadora, Evodio Velázquez anunció que pésele a quien le pese seguirá gestionando la línea de crédito por 158 millones de pesos que le aprobó el Cabildo y que va a ir a donde sea necesario a defender un derecho que considera le asiste y por ende llegará “hasta las últimas consecuencias”…Por su parte el diputado perredista Sebastián de la Rosa Peláez, asegura que con fundamento en el artículo 30 de la Ley de Disciplina Financiera de las Entidades Federativas y los Municipios, el Ayuntamiento de Acapulco sí puede contraer el tan llevado y traído préstamo sin la aprobación de la Legislatura local, porque –según él- “es válido y procedente”…En esa dirección el diputado local del Movimiento Ciudadano, Ricardo Mejía Berdeja, puntualizó que la reforma constitucional en materia de financiamiento y deuda pública de estados y municipios, “no se hizo para dar manga ancha a alcaldes corruptos que, pretextando estas reformas, ahora hacen procesos oscuros faltos de los mínimos requisitos de ley”, explicando que tanto los Cabildos y las instituciones financieras tienen la obligación “de presentar criterios y someterse a procesos competitivos”, subrayando que el acuerdo por mayoría simple del Cabildo de Acapulco carece de fundamentación legal, pues no señala al Artículo 30 de la Ley de Disciplina Financiera de Estados y Municipios, que a la letra dice que no se podrán contratar obligaciones a corto plazo sin autorización de la Legislatura local, además de que ningún crédito puede ser destinado al pago de gasto corriente, rematando Mejía Berdeja que por ser un acuerdo económico ilegal e inconstitucional el Banco Interacciones no autorizó tal crédito, lo que por cierto esa institución financiera ya hizo público

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