MEMORÁNDUM

*** La adversidad; el plan para crecer

Gerardo Ruano Cástulo
Venía triste de regreso al pueblo. La jornada había sido mala. Ya oscurecía. No cazó nada para tener alimento. Iba sumergido en sus pensamientos, preguntándose si el poder divino le había abandonado, cuando de pronto cayó en un agujero.

El golpe lo desestabilizó por un rato. Cuando recuperó el sentidco, exclamó hacia sus adentros: “Lo qué me faltaba. Quedar atrapado en este hoyo. Si es que existe Dios, de mí se ha olvidado.”.
Permaneció sentado un tiempo en el pozo, para pensar cómo salir de ahí. En eso escuchó voces fuertes. Por el ruido de los cascos de los caballos, se trataba de varias personas. Iba a gritar pidiendo auxilio. Pero al escuchar lo bajo del lenguaje con el que se expresaban, optó por guardar silencio.
Era una banda de forajidos. Escuchó que robarían a quien encontraran y que caerían por asalto en el pueblo al día siguiente.
Luego que se alejaron, pegó un brinco impresionante, alcanzando una rama que caía hacia el pozo. Se sujetó con fuerza y logró salir.
Conociendo mejor el territorio, llegó al pueblo, en tanto los forajidos descansaban haciendo planes. En la madrugada cuando llegarían por sorpresa, los sorprendidos fueron ellos. Estaban rodeados. Su destino era la prisión. Ahora, el que había caído al hoyo, reflexionaba: “¿Qué habría pasado, si no hubiese caído en el agujero?”. (Del taller de la imaginación de Juan Francisco R.)
Si caemos en un bache. En una situación difícil. Tal vez, es el llamado a pegar un brinco impresionante. Y a darnos cuenta, que esos momentos reclaman lo mejor de nuestra imaginación. De nuestra creatividad. De nuestro esfuerzo. De nuestro, y no de otros.
Es cierto, que muchos comprendemos que las cosas pasan por algo, pero muy pocos nos ponemos en marcha entendiendo pronto los mensajes y las situaciones.
En el caso de Guerrero, es evidente que la situación complicada que se viene con el gasolinazo, ha sido bien tomada por el Gobernador Héctor Astudillo Flores, quien de inmediato ha puesto cartas en el asunto. El plan para garantizar la estabilidad del estado así lo indica. Es necesario seguir invirtiendo en obras y servicios. Es importante mantener los programas de apoyo donde más se necesitan.
Eso requiere de un sacrificio, y el Mandatario Estatal es el primero en poner el ejemplo. Y mejor aún, su trabajo apunta a fortalecer los lazos de unidad entre los guerrerenses. Sumar los esfuerzos de empresarios y organizaciones; líderes políticos, económicos y sociales en una misma dirección. La de ser solidarios en éste momento crítico.
En esa misma línea se entiende la visita del Gobernador Héctor Astudillo Flores, al Hospital de la Madre y el Niño Guerrerense de Chilpancingo, porque precisamente, el plan va enfocado también a fortalecer el sistema de salud. A verificar que no se afecte la atención. En especial de las madres embarazadas y los recién nacidos.
Las situaciones críticas son para eso; para ponerse en acción.
Y EN EL TERRENO político también se aprecia la mano del mandatario estatal. Sabe que en el ámbito nacional el PRI tiene complicaciones por la baja de los bonos del Presidente Enrique Peña Nieto. Y tan lo sabe, que por algo ha dado todo su respaldo, a la próxima asunción de Heriberto Huicochea Vázquez, a la dirigencia estatal del PRI, con la consigna clara de fortalecer la estructura y tenerla a tono para lo que se viene en 2018.
Apostar por Huicochea Vázquez, en éste momento, habla del grado de confianza que recae sobre el ex director del seguro popular. Esa es la cuestión.

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