MEMORÁNDUM

*** ¿Por qué a mí me pides de beber?

Gerardo Ruano Cástulo
En virtud de la apertura política y más justa que hoy se registra en la equidad de género, podemos decir que las mujeres tienen mayor participación en las decisiones de orden público. Su presencia es más palpable en los diferentes sectores del desarrollo.

Esto trae a mi mente, aquella ocasión en que Jesús llegó a Samaria y se sentó a descansar junto al pozo de agua de Jacob. Ahí, llegó una mujer samaritana para llevar agua, a quien el maestro le pidió que le diera a beber.
La mujer respondió, a sabiendas de las diferencias que existían entre samaritanos y judíos, “¿Por qué a mí me pides de beber?”. La respuesta llegó a las pocas horas. Después de saber de quien se trataba, ella fue el puente para que más samaritanos conocieran a Jesús.
Todos los ámbitos claman por la presencia de la mujer. Por su talento. Por su transparencia y honestidad. Por su incansable vocación de servicio.
Tenemos ejemplos palpables de todo esto en Guerrero. Comenzando con el testimonio de la Presidenta del DIF estatal, Sra. Mercedes Calvo de Astudillo, quien todos los días aporta trabajo en favor de los que menos tienen.
Doña Merce, como le dicen cariñosamente, cada día, transmite que pone todo el corazón en lo que hace. Y eso, es precisamente lo que más necesitamos en la sociedad actual; poner más corazón que excusas, pretextos y dilaciones.
También, una mujer que ha venido demostrando su calidad humana y vocación al servicio, es la diputada local, Beatriz Alarcón Adame. Sin duda, la diputada Bety, como se le conoce desde hace un buen rato, es ejemplo de sencillez y sensibilidad.
La legisladora es de esas personas que se reciben con gusto. Su preparación se aprecia, en el buen trato que da a la gente y su gran disposición a sumarse en las tareas de desarrollo.
Se le ha visto en las colonias y comunidades caminando con la gente. Allá en donde existen más necesidades. Y lo mejor, es que es ahí, donde saben de su mano solidaria. Lo dicen las obras sociales que ha gestionado y una buena cantidad de apoyos.
Bety Alarcón, es una mujer de trabajo, que está retribuyendo a su partido el apoyo para llegar al Congreso, con una labor permanente a ras de piso. Muy cerca de la población.
Si, aportando en el ámbito legislativo. En apego a su buen nivel de preparación. Pero además, escuchando y atendiendo a la gente. Tal y como debe hacerlo una buena representante popular.
EN OTRO RUMBO. Y así como se ve la presencia en el campo de la asistencia social y el legislativo, también se aprecia en la búsqueda de mayores espacios, como lo es la próxima candidatura a la presidencia de la república por el PRI.
Su nombre es Ivonne Ortega Pacheco, quien decidió pedir licencia a su cargo de diputada federal, para ir en la conquista de su sueño, que es no solamente la candidatura priísta, sino la presidencia de la república.
Hoy, con el crecimiento de la participación de la mujer, no es extraño que una mujer, Ivonne Ortega, busque esa oportunidad. Mucho menos, cuando el PRI, en el ámbito nacional, acusa una severa crisis.
Si le apuestan a un rostro distinto. Ivonne Ortega ya ha levantado la mano. Esa es la cuestión.

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