TUMBANDO CAÑA

Denuncian presuntos actos de violación sexual en la cruz roja de Acapulco

Juan Antelmo García Castro

Tres casos de abuso sexual fueron denunciados ante el administrador de la Cruz Roja en Acapulco, Ricardo Ocampo Uribe, en contra del jefe de paramédicos Alfredo Anzo Barrios, hechos repudiables que se mantenían ocultos sospechosamente hasta que uno fue presentado a la Fiscalía General del Estado (FGE), descubriéndose más intentos de violación en contra de jovencitas que prestan sus servicio social en una institución que se jacta de brindar ayuda humanitaria…

Copias de las valientes denuncias turnadas al administrador de la Cruz Roja fueron entregadas a periodistas y medios de comunicación, protegiéndose los nombres de las víctimas por obvias razones…En las tres acusaciones se relata que al momento de concluir con el curso para ejercer como paramédico, las aspirantes deben cumplir un periodo de servicio social en la benemérita institución, sin pago alguno…Precisamente en ese lapso, entre la conclusión del curso y el inicio del servicio social, las tres jóvenes fueron encerradas en ambulancias de la institución para presuntamente ser abusadas por el jefe de brigadistas, Alfredo Anzo Barrios…Las víctimas enviaron un escrito al administrador denunciando el hecho y confiando en que éste se pondría en contacto con las autoridades, pero nada de ello sucedió, por el contrario, Ricardo Ocampo Uribe se limitó a entrevistarse con cada una de las mujeres, prometiéndoles que le aplicaría un severo correctivo al abusador pero que, por favor, no acudieran a las autoridades correspondientes, mucho menos que hicieran público el condenable suceso…Una de las jovencitas afectadas tiene una grabación con la plática sostenida con Ocampo Uribe y en ella se escucha que les pide no denunciar…“Nos dijo que no comentáramos el problema con nadie, que no dijéramos nada, que él no quería ningún escándalo, que después vería que hacía con el abusador”, reveló una de las víctimas, que exigen justicia, pero también la solidaria intervención de la señora Susana Palazuelos que ha mantenido un silencio cómplice.

LOS DIABÓLICOS PACTOS DEL ALCALDE DE CHILPANCINGO

Luego de reunirse con los comandantes supremos de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG), el alcalde de Chilpancingo Marco Antonio Leyva (MAL) expresó a bocajarro que si para tener orden y paz en el municipio que desgobierna sea necesario pactar con el diablo “lo haré”, alardeó satánicamente…En la referida reunión con el estado mayor de la UPOEG, Leyva Mena confesó que no tiene capacidad para brindar un mínimo de seguridad pública a las comunidades del municipio chilpancingueño, aceptando por ello la intervención de policías ciudadanos...“He de reconocer que no tengo la capacidad para dar seguridad a todas las comunidades y que necesitamos órganos coadyuvantes, como ustedes”, les dijo Marco Antonio Leyva a los policías ciudadanos, aunque les recomendó “estar más calificados y capacitados” en defensa de los derechos humanos y en el manejo de las armas.