TRAZOS… TIME

El Tianguis Turístico Itinerante y Peña Nieto

Federico Nogueda 
El Tianguis Turístico es el instrumento ideal para promover la oferta de los destinos turísticos del país, dirigido a los profesionales del turismo nacional e internacional

Fue en el gobierno panista de Felipe de Jesús Calderón Hinojosa, bajo la operación precisamente de  la señora Gloria Guevara Manzo, quien propuso y anunció que el puerto de Acapulco, ya no sería la única sede para realizar el Tianguis turístico, lo que levantó un gran malestar en el sector turístico de Guerrero.
De esta forma,  fue el presidente Enrique Peña Nieto quien como candidato a la presidencia dijo que no se le quitaría en su totalidad el magno evento y que sería itinerante y que lo tendría cada dos años, para que en el 2015 regresara al puerto.
Sobre esa expresión, el antecedente del Tianguis Turístico se remonta a 1975, cuando nace para dar paso a la primera edición en 1976, y de ahí hasta el año 2011 fue la última edición no interrumpida, para volver en el 2015. En 2012 lo organizó el estado de Jalisco en Puerto Vallarta, después Puebla, y Cancún.
Es oportuno destacar, ya que no se puede negar que hace 13 años las circunstancias de seguridad eran diferentes a las que se tienen en estos momentos, por ello el secretario de Turismo federal, Enrique de la Madrid explicó que eventos como el Mextenis, la Convención Bancaria y el Tianguis Turístico tienen por objetivo primario repuntar y reposicionar las visitas hacia este municipio guerrerense. 
Ya que de acuerdo al Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), joyas turísticas como Playas de Rosarito, Los Cabos, Manzanillo, Puerto Vallarta, Mazatlán, San Miguel de Allende, Acapulco, Cuernavaca, Cancún y Playa del Carmen, han sufrido la inseguridad.
La presencia de Enrique presidente, en este lunes cuando se inaugura el Tianguis Turístico, nos manda el mensaje que la federación sigue en una posición por seguir impulsando, levantando al destino de playa de Acapulco, Ixtapa y Taxco.
Quizás aparte de los  eventos turísticos le hace falta al puerto que la federación hubiera invertido en obras gigantes de modernización urbana, de más impacto y detonación.
Ya que el puerto se lo merece, solo basta recordar que desde a mediados de 1700 en lo que fue la Nueva España y después el México independiente, se le identificaba al país por el puerto de Acapulco, por la famosa Feria de la Nao de China o Galeón de Manila, y no por el nombre de México y no se diga en los años 40s, el boom internacional en turismo por Acapulco. 
Así que el próximo presidente de México, tiene el compromiso histórico y moral, por seguir invirtiendo en Acapulco. Ya que como reza  por ahí una frase: ‘Acapulco es más que un destino turístico, es un estado emocional’, y anécdotas hay muchas donde se hicieron felices.

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