*Por varias horas padres y maestros se manifestaron en el tramo de La carretera Acapulco-Zihuatanejo a la altura de Cacalutla.
Por Alberto Solís Loeza
Atoyac de Álvarez, Gro.-Parece ser que en este municipio los problemas sociales son atendidos por las autoridades a base de protestas y manifestaciones, tal como la que se llevaron a cabo este día maestros, alumnos y padres de familia de la escuela secundaria número 220, de la comunidad del Quemado, quienes exigen la demolición del centro escolar que resultó dañado por el sismo de 7.1 grados escala Richter, de la semana pasada y que devastó gran parte de la capital de nuestro país.
Los manifestantes se apostaron cerca del tramo carretero que pasa por Cacalutla, pusieron un retén informativo para darles a conocer a los automovilistas la negativa del gobierno federal y del gobierno estatal, para reparar éste y otros centros escolares que están realmente afectados por los movimientos telúricos.
Raudel Bugarín Hernández, es el subdirector académico de esa escuela de la zona rural de Atoyac, y dijo que no les hacen caso los tres órdenes de gobierno; por esa razón decidieron parar labores este día y salir a las calles, en este caso a la carretera federal Acapulco-Zihuatanejo, para llevar a cabo esta protesta, para ser escuchados y evitar que los alumnos y el personal educativo sufran algún percance en caso de que ocurran más temblores en esta región de la Costa Grande.
Una vez más, le tocó el turno al delegado regional de Gobierno, Juan Méndez Nogueda de dialogar con los manifestantes, a quienes les propuso privilegiar el dialogo con las autoridades, además les invitó a comprender la difícil situación por la que atravesamos los mexicanos, por lo que hizo el compromiso de servir como puente de comunicación y de diálogo con el gobierno estatal y federal para buscarle una salida a este problema.
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