MEMORÁNDUM

*** Camina con buen paso.

Gerardo Ruano Cástulo

Las redes sociales son un magnifico vínculo entre la sociedad. La información se recibe de manera rápida. Inclusive, en el momento mismo del suceso. El texto, la imagen o el video; todo con un simple enviar o subir. Pareciera que estamos más cerca. Pero en realidad; los grandes avances tecnológicos, nunca habrán de sustituir lo más importante y valioso: la presencia.

La red social es de gran impacto. Eso, nadie lo discute. Por esa misma razón, ahí se plasman hoy, las grandes polémicas de las campañas electorales. Cada equipo; cada simpatizante; está haciendo la tarea. Sin embargo, una de las mayores fortalezas de los candidatos, es la forma en que hagan presencia en ese mundo.

Porque el tema no es estar simplemente. O en estar haciendo ocurrencias. Mucho menos, simular el impacto de una “gran campaña”. El asunto es, estar en territorio. Estar cerca de la gente. Transmitir el grado de aceptación y confianza que se despierta en la ciudadanía.

Ir a territorio, casa por casa, no es una tarea sencilla. Es tener el valor para enfrentar el verdadero debate; el del ciudadano, que todos los días convive con necesidades y problemas reales. Y no con los memes y barbaridades de excesos que abundan en redes sociales.

Ir, casa por casa, es un ejercicio saludable. De salud política. Porque el candidato va de frente al encuentro de la gente. No se escuda en eventos masivos. Ni tiene la protección de vallas y grupo de guaruras. Es, estar ahí, para escuchar y atender los planteamientos. Y por supuesto; para exponer de manera franca y directa, sus razones por las que desea ser su representante popular.

Ir a territorio, casa por casa, es un acierto del candidato del PRI por el primer distrito local electoral, César Armenta Adame. Un político, que sabe de la importancia de la presencia. De que su lugar, es estar siempre ahí, cerca de la gente. Desde ese punto se parte hacia las redes sociales; nunca a la inversa. Porque en todo caso, eso sería simulación. Una farsa.

No hay nada como la presencia. Y César Armenta, ha hecho una gran elección. Caminar calle por calle el distrito que aspira a representar; encontrando magníficos resultados, al estar recibiendo grandes muestras de afecto y respaldo de la gente.

Con éste movimiento; de trabajar a ras de piso; de ir casa por casa; César Armenta, toma la batuta en el distrito. Se pone por delante de sus adversarios. Comienza, dejando constancia, de su calidad humana. Y de que no es un político improvisado. Tiene bien claro el proyecto. Entendiendo perfectamente, que su deber, es estar del lado de la gente; como siempre lo ha hecho, durante su carrera política.

Casa por casa. Eso es presencia. Las redes son un simple instrumento o vehículo. Algo que hay que saber usar.

Con buen paso, camina César Armenta.