MEMORÁNDUM

***Puntual postura del Gobernador
Gerardo Ruano Cástulo
Es simple; si ya en funciones, el ahora Presidente Electo, Andrés Manuel López Obrador, decidiera nombrar a sus súper delegados, con características de gobernador, estaríamos hablando de pisotear lo plasmado en la constitución. De pasar por encima de la voluntad popular. 

Ayer, en la reunión de la CONAGO, a la que fue invitado el presidente electo, el Gobernador, Héctor Astudillo Flores, en representación de los Gobernadores emanados de su partido, planteó la necesidad de saber, cual es la idea y posibles funciones de los multicitados delegados. Se pronunció por fortalecer la relación de respeto. Por entablar comunicación directa con el presidente. 
El planteamiento fue claro, en la ruta de la coordinación y trabajo constructivo. Nadie apuesta al golpeteo. La apuesta es por el respeto al federalismo. Al reconocimiento y trabajo con los gobernadores. Con quienes el pueblo eligió en las urnas. 
Una petición sana. Hay leyes e instituciones. ¿En dónde entra la figura de los súper delegados? Los delegados actuales tienen su razón, porque la presencia de la federación es permanente. Así como la coordinación con los gobiernos de los estados. 
Sí, en todo caso, los ya nombrados súper delegados, están palomeados por AMLO, para buscar la gubernatura, no parece ser la mejor forma, por medio del ejercicio de esa posición cuestionable. Que de entrada, amenaza con pisotear la voluntad popular. La misma constitución. 
La vocación democrática estaría llamando a la sana convivencia. Al respeto de la legalidad. A trabajar sin sesgos partidistas. Las elecciones ya quedaron atrás. Ya no hay candidatos. Ahora, debiera entrar en acción, el estadista con liderazgo para trabajar sin distingos, ni privilegios. El liderazgo que dé certeza y no señales de avasallamiento. 
En ese sentido, el gobernador, Héctor Astudillo Flores, solo ha planteado la necesidad de trabajar en el marco del respeto y suma de esfuerzos. Lo que debe pedirse ante el planteamiento de súper delegados, a los que algunos, ya les atribuyen funciones de fiscalización. O sea, hay quienes no se miden, y los pasan hasta por encima de Congresos y órganos de Auditoría. Algo totalmente risible. 
Imaginar, que después los gobernadores nombrarán delegados municipales, pasando por encima de los cabildos. Nada saludable el tema. El mejor camino, parece ser el fortalecimiento de la comunicación con los gobernadores. Una relación de altura. De nivel. Que se traduzca en mejor calidad de vida de los mexicanos; por ende, de los guerrerenses. La postura del Gobernador, Héctor Astudillo Flores, muy puntual. Totalmente correcta.

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