*Presidentes municipales omisos en acciones para combatir la violencia de género.
*Iniciativa Spotlight para Chilpancingo, donde las autoridades están excluidas.
Roberto Santos
Aunque falta saber con exactitud quiénes son los presidentes municipales que se han comportado omisos en las acciones para combatir la violencia hacia las mujeres en la entidad, la queja ha salido a los medios y se anuncia una reunión que presidirá el gobernador para hacerles una llamada de atención.
Está claro que para hacer realidad las acciones que desde el gobierno estatal se realizan en coordinación con otras unidades, incluidas las municipales, la participación de los presidentes municipales es necesaria para poder avanzar en reducir la violencia en contra de las mujeres y reducir el porcentaje de los feminicidios.
Es el momento de que ya deben entender que la realización de acciones orientadas hacia el cambio de pautas culturales en la población para proteger y respetar a las mujeres es una cuestión obligatoria, y va más allá de sus posturas ideológicas y culturales.
Otra obligación es garantizar la prevención integral, así como el acceso a los servicios de atención a las víctimas mediante la investigación efectiva, reparación del daño y la sanción; e impulsar la coordinación institucional para fortalecer la política nacional con un carácter integral.
En algunos casos el cambio tendrá que pasar por la transformación de la mentalidad machista y misógina de las mismas autoridades municipales, como es el caso del presidente municipal de Tlapa.
Esto no solo se refiere a los hombres, porque tenemos autoridades mujeres que también son reproductoras de prácticas misóginas y carentes de sororidad.
La petición de las mujeres está dirigida también a la diputada presidenta de la Comisión para la Igualdad del Congreso del Estado, Erika Valencia Cardona, porque no ha asistido a las sesiones de trabajo de los distintos órganos que atienden la Alerta de Violencia de Género en el Estado.
Se espera que en estos días, sea el gobernador Héctor Astudillo Flores quien llame a reunión a las autoridades omisas y ausentes en las acciones de prevención para la violencia de género y las convoque a trabajar en coordinación con aquellas unidades que ya están en acción.
Y es que deben saber que todas las acciones con esos fines deben reportarse a nivel nacional ante la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, organismo que tiene a su cargo el Programa Integral para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres 2014–2018, publicado en el Diario Oficial de la Federación, el 30 de abril de 2014
Otro punto dónde debería intervenir el gobernador es en el relacionado con la Iniciativa Spotlight, pues siendo Chilpancingo donde se va a aplicar, es raro o curioso que las autoridades hayan sido excluidas de las estrategias que se aplicarán, así como las acciones en particular para beneficio de las mujeres.
Lo correcto es que exista coordinación entre los tres niveles de gobierno para que las acciones sean más efectivas y se profundice en los logros.
Sobre todo que esta iniciativa será vigiladas por la ONU y la UE.
Por eso es raro que si se va a aplicar en Chilpancingo, justamente sean las autoridades las que no sepan que acciones se van a aplicar, dónde y cuándo.
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