Un deficiente consumo de agua natural puede ocasionar deshidratación y cefalea, por lo que beber al menos dos litros de agua al día es la recomendación para evitar complicaciones en nuestra salud, indicó el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El médico familiar Ángel Gómez Carbajal explicó que el cuerpo humano está compuesto en un 60 por ciento de agua y que ésta es la mejor fuente de hidratación. Además, es indispensable para las articulaciones, la piel y muchas funciones más del organismo.
Indicó que durante el confinamiento se pude hacer un consumo mayor del líquido, de hasta tres litros. Se deben evitar las bebidas endulzadas, ya sean comerciales o de frutas con azúcar, debido a las grandes cantidades calóricas que las componen.
Gómez Carbajal comentó que diariamente nuestro cuerpo realiza un sinnúmero de procesos, como la sudoración, en los que se utiliza agua. En condiciones normales y con un adecuado funcionamiento del riñón, una persona pierde alrededor de litro y medio cada 24 horas.
Algunos síntomas que presentan las personas que no consumen agua son: dolor de cabeza y musculares, cambios de humor, fatiga, adormecimiento de extremidades, alteraciones de la vista, mareos y deshidratación.
Recordó que la estrategia a seguir es la “Jarra del buen beber”, que contribuye como guía en donde se ilustran las proporciones de líquidos recomendadas para consumir al día. Añadió que el consumo de agua favorece la salud bucodental, evita el incremento de peso, diabetes, aumento de triglicéridos y enfermedades renales y las respiratorias.
De igual forma, destacó que se debe evitar incrementar el uso abundante de sodio (sal de mesa) en los alimentos. Por último, hizo un llamado a la población, principalmente la que habita en lugares cálidos, a extremar precauciones para prevenir padecimientos a consecuencia de las altas temperaturas.
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