El doctor Javier Solorio es persona que “inspira confianza”

*“En esta ocasión yo sí puedo meter las manos al fuego por él”: Óscar de Llano Largo.

Acapulco, Guerrero.- Vecinos de la colonia Ampliación Amalia Solorzano y Llano Largo, reconocieron por su honestidad  al síndico de Acapulco y agradecieron todas las gestiones y apoyos que han recibido desde la sindicatura.

Los vecinos dijeron que si bien es cierto que se necesitan entre 10  o 15 años para cambiar y mejorar Acapulco, pero “el cimiento aquí está y se llama Javier Solorio Almazán”, a quien le externaron su apoyo para sus siguientes proyectos.

Óscar Gómez, presidente de los padres de familia de la escuela de Llano Largo, dijo a los presentes que el doctor Javier Solorio es una persona que “inspira confianza”. 

“En esta ocasión yo sí puedo meter las manos al fuego por él y decir que lo apoyo en todos sus proyectos, le tengo mucha confianza porque Javier es una persona que si dice voy a dar esto lo cumplo y no hay necesidad de andarlo correteando o meterle documento, o andar diciendo oye pero es que quiero verlo. Nunca se anda ocultando, porque muchos políticos así lo hacen, los citan y cuando van no los reciben, ¿por qué motivo?, porque no quieren soltar para ayudar al pueblo, prefieren hincharse las bolsas de su dinero acá adentro”.

Don Óscar afirmó que con el doctor Javier Solorio es distinto, “él no se esconde, es diferente”, por lo que los conminó a que si de verdad se quiere un cambio verdadero, se tiene que apostar a la honestidad que representa el síndico de Acapulco. 

Dijo que con el proyecto del doctor Javier Solorio,  ganan todos, reiteró que “yo meto las manos al fuego, no hay reversa, si alguien viene y me dice aquí hay más lana, eso ya no, prefiero ayudar a alguien honesto para que los beneficios lleguen a la gente”.

Aseguró que ya basta de que comisarías van y comisarías vienen, políticos van y vienen y Llano Largo sigue igual: “no vemos un verdadero cambio, tenemos que hacer un cambio verdadero para sacar Acapulco adelante”.

Pidió de corazón que se unan a este proyecto y que cada uno de los asistentes les platique a 5 o 10 personas más del proyecto de honestidad  del doctor Javier Solorio, porque él es el bueno para transformar Acapulco.

Por su parte el doctor Javier Solorio Almazán, les compartió que cuando entró como síndico, “inmediatamente me di cuenta que los trabajadores de saneamiento básico eran los que ganaban menos, entonces en una de esas que iba caminando por el Zócalo, iba un señor con su bote y de repente vi que el bote se movía, me acerqué y vi que en ese bote de basura iba la niña del señor, jugando con dos muñequitos”.

“Imagínense que esa niña que iba en ese bote de basura sea nuestra hija, los invito a que imaginemos y que si ese acto no nos indigna, compañeros acapulqueños de Llano Largo, nada nos va a mover, hoy Acapulco tiene todos los indicadores negativos, no nos hagamos menso”.

Javier Solorio aseguró que en Acapulco, de acuerdo con el  Consejo Nacional de Evaluación (Ceneval), viven 100 mil seres humanos en extrema pobreza y que de esos, 40 mil son niñas y niños que están viviendo la desgracia y todas las consecuencias de estar en extrema pobreza.

Reiteró que si eso “no nos  indigna y si eso no nos mueve a cambiar, nada nos va a cambiar y nada nos va a mover”. Hizo un llamado a los vecinos presentes a que analicen bien qué tipo de futuro quieren para ellos, para su familias y para Acapulco.

Javier Solorio dijo que si alguien hace 20 años “nos hubiera dicho que en estos momentos Acapulco iba a ser de los municipios con mayor violencia en todo el mundo, si alguien nos hubiera dicho que Acapulco iba a ser el municipio con más pobreza extrema, si alguien nos hubieran dicho que estamos a punto de acabar con nuestra bahía y convertir a la Laguna de Tres Palos en la mayor fosa séptica del mundo, no lo hubiéramos creído”.

Se lamentó que ningún niño, que ningún joven, nacen “siendo delincuentes, hay que entender la situación en la cual ellos fueron creciendo y se fueron desenvolviendo y por qué tuvieron muchas veces que  actuar y hacer este tipo de cosas”.

Aseguró que la realidad ya nos alcanzó y ahora debemos emprender un arduo trabajo, con medidas disruptivas para sanear todo en Acapulco.

Estuvo de acuerdo con don Óscar Pacheco de que se van a necesitar más de 15 años para recuperar totalmente Acapulco, por eso está proponiendo que se aplique la Agenda 2030 del agua, para que en ese lapso se pueda resolver de una vez por todas el problema de abastecimiento de agua.

El doctor Javier Solorio Almazán, estuvo acompañado  por liderazgos como Óscar Pacheco, María Hernández Cuadra, Martín Ibarez y Óscar Gómez.