Acapulco, Guerrero.- Uno de los estadios en la ciudad de Cajeme, Sonora, que adquirió el gobierno federal a orden directa del presidente López Obrador para transformarlos en estadios de beisbol, amaneció con pintas que exigen paz hacia el gobierno de López Obrador.
En las pintas se observan las frases “No quiero estadio, quiero paz para Obregón” y “Paz para Obregón“.
Las frases aparecieron días después de que fuera asesinado el abogado de la familia LeBarón y candidato a la alcaldía de Cajeme, Sonora, por el partido Movimiento Ciudadano, Abel Murrieta Gutiérrez.
Sobre al asesinato, las autoridades siguen dos líneas de investigación: la primera línea está relacionada con su profesión como abogado y la segunda con sus aspiraciones políticas.
Por esa última posible motivación, este viernes, en una reunión de emergencia, llevada cabo en Ciudad Obregón, la segunda más poblada de Sonora y de la que forma parte Cajeme, integrantes de la mesa de Seguridad acordaron revisar el protocolo de protección a candidatos en el estado, donde hay más de 500 aspirantes para 101 cargos para las elecciones de junio.
La tarde del jueves, Abel Murrieta realizaba un mitin, entregaba volantes y pegaba etiquetas en automóviles, cuando hombres armados lo rodearon y acribillaron, recibiendo al menos 10 disparos, incluyendo dos en la cabeza.
La ejecución del abogado ocurrió en una de las zonas más concurridas de Ciudad Obregón, que hospeda a Cajeme (Sonora), uno de los cuatro municipios más violentos del país, según organizaciones.
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