DE ADICTO A ADICTO

 Las fuerzas destructivas de tu propia vida

Por Ernesto Salayandía García

Atmosferas contaminadas de energía negativa


Tal vez has vivido experiencias como las mías, las que aquí te platico, hace muchos años, llegue temprano a una escuela primaria donde me dieron permiso de compartir la historia de mi vida, recuerdo que había preparado el tema de la nicotina, El asesino silencioso, era mi intención dar el mensaje de prevención a los niños de tercer, cuarto, quinto y sexto grado, la recepcionista me hizo pasar a la oficina de la directora a esperarla debido a que no tardaba en llegar, cuando entre al reducido cuartito de oficina, sentí una sensación muy extraña, percibi el ambiente muy tenso, me invadió una carga muy pesada de energía de muy mala vibra, aparte que había un gran desastre de papeles por todos lados, el aire acondicionado hacia que circulara un olor no muy agradable que digamos, olía como a mis tenis viejos  que usaba en la secundaria y no me los quitaba ni para dormir, a patas rancias, diría mi abuela, cuando llego la directora, en piyama y de prisa comprobé de donde venía el mal olor, era de esas personas que destilan un humor muy fuerte, salimos de la oficina y en la recepción, aun preserve la atmosfera de malas vibras, la verdad, sentí un ambiente muy pesado, como lo he sentido en muchas ocasiones en infinidad de casas, negocios y oficinas, incluso en algunos grupos de autoayuda, he palpado la mala vibra que ahí se destila.- ¿ Te ha sucedido igual a ti?


Reflexionando a 

la hora del recreo


A media mañana, ya casi terminaba mis platicas en 7 salones, solo me restaba dos de sexto grado que iba a visitar después de la hora del recreo, sentado en una banca al lado de un ciprés enorme, me quede pensando sobre esa tormenta de malas vibras que había palpado en salones, recepción y en la oficina de la directora quien daba una imagen pésima, de fodonguez, autoestima baja e irresponsabilidad al presentar ese a trabajar en piyama y comencé a dar un recorrido a mi memoria de las caras de secretarias, maestras y personal administrativo, reflexione, sobre el lenguaje no verbal que detecte en ellas, para empezar, las caras de limón agrio, esas expresiones de amargura, tristeza, frustración, como que no ha habido un sábado gigante en muchos sábados, ni aquello con aquellito, por supuesto, hombros caídos,  jorobadas, apagadas, sin luz, incluso, desarregladas, desganadas e invadidas de pereza y conformismo, es lógico que estas emociones torcidas se contagian y eso es lo que provoca tanta tensión ambiental, así como los pensamientos neuróticos, psicóticos, patológicos, extremadamente negativos.


Me queda muy claro, que uno atrae lo bueno o lo malo


Licha, mi madre, tenía una vecina  mayor que ella, recuerdo, que era inoportuna, llegaba a la hora de la comida o de la cena, hablaba mal de medio mundo, con todos tenia vela en el entierro, criticona, metiche, mala vibra, con comentarios muy desagradables, por ejemplo, si mi mama estaba pintando la cocina, ella externaba su punto de vista, sobre los colores, los trazos y los costos del pintor, no daba oportunidad de que otros opináramos, preguntaba, y preguntaba de la inmutabilidad del cangrejo, se metía en lo que no le importaba, recuerdo, que nos amargaba la hora de nuestros sagrados alimentos, mala vibra hasta las cachas, ya cuando por fin se iba, nosotros, mi abuela, doña Aurora, mi madre y mis hermanos, nos comportábamos muy neuróticos, mal y de malas, ella, la vecina, destilaba su veneno y nos contaminaba, radiaba envidia, mi madre era muy guapa, con un gran porte y una personalidad fuera de serie, la doctora Ruelas, le criticaba, que si el peinado, los zapatos, el vestido, los accesorios, la atacaba con sus comentarios ni al caso, triste es la vida, pero ella vivió sus últimos años en la soledad, la frustración, decepción y sin duda en una depresión muy prolongada, nada que ver con la vida que vivió mama Licha.


El síndrome de la 

borrachera seca


Yo lo viví.- Muchos de los alcohólicos en recuperación y personas en general, andan mal y de malas, los carcome la envidia, no permiten el éxito de otros, son severos críticos, chismosos, intrigados, levanta falsos, sabiondos de todo opinan en todo se meten, ven la espiga en el ojo ajeno, pero no ven la viga en el propio, son los que siembran de cizaña, destilan venenos, les encanta desprestigiar, hablar mal cobardemente a espaldas de alguien, manejando mentiras como si fueran verdades, son hipócritas, aparentan ser lo que no son, por supuesto, son farol de la calle y obscuridad de sus casos, tipos, tipas negativos, mal nacidos son los que contaminan la atmosfera emocional negativa, no están satisfechos con nada, se hacen pasar por víctimas, cuando en verdad, ellos, ellas, son los victimarios, no tienen paciencia, ni decencia, mucho menos respeto, el nivel de neurosis, los hace mecha corta, explosivos, agresivos, por desgracia estos patrones de conducta son palpables en gente perfeccionista, narcisistas, metiches que no tienen paz interna, la envidia que es un puro veneno del alma, no les permite la humildad, ni la paz interna, son los que van a misa a criticar, a darle vuelo a la lujuria, por ello  se gestan las fuerzas emocionales destructivas en infinidad de lugares, el que siembra vientos, cosecha tempestades, el que mal obra, mal acaba, no hay una liberación emocional, ni crecimiento espiritual para este tipo de seres amargados, frustrados y resentidos con la vida, que ellos mismos se han trazado, por ello, recuerda siempre, una sonrisa por dentro y otra por fuera. 


Mal y de malas


Hay personas que destilan amargura, resentimientos, dolor, soledad, tristeza, que andan buscan no al que se la hizo, sino a quien con quien se la desquitan, esos seres, son tipos acomplejados, llenos de traumas, acomplejados que se desviven para causar daño, estilan, juegan con las emociones, los sentimientos de otros, por supuesto que son hipócritas, aparentar ser de una manera, pero su enfermedad emocional, mental y espiritual, los trasforma en verdaderos sicarios de las emociones, son los que tiran la piedra y esconden de la mano, están sumamente cargados de energía negativa, destilan veneno cobardemente a espaldas de otros, por envidia, son los sembradores de intrigas, chismes, criticas, de ahí viene la contaminación emocional, esta lluvia de energía negativa que se palpa en cualquier lugar, un gran porcentaje, trae a su espalda la piedra del Pípila, con los han años han ido acumulando y acumulando de energía negativa, no se han dado la oportunidad de descaro, el único modo, es hablar mal y a espaldas de otros, la gente envidiosa, es mitómana, venenosa, son seres perversos que dañan a diestra y siniestra, les importa un bledo lesionar la integridad y la dignidad de sus víctimas, son, gente mal nacida, malas vibras, hierba mala


La catarsis ante todo


Lo más recomendables es que no te aboques a la tarea de guardar y guardar, debes de aprender a hacer catarsis, a vomitar esas emociones torcidas, ese veneno que provoca la envidia, no debes de quedarte con nada, de lo contrario, no serás libre, ni feliz, no seas es escusado de nadie, sacúdete a tiempo antes de que la negatividad te ahogue.- Cuentan, que una vez se cayó un burro en un hoyo como de dos metros, los parroquianos, trataron de sacarlo de mil maneras, pero no pudieron, el espacio no les permitía, entre todos, llegaron a la conclusión que abría que enterrar vivo al burro.- Ni modo.- Cual va siendo la sorpresa que cada vez  que le caía una pala de tierra en la cabeza del burro, este se sacudía, tirando al suelo la mayoría de la tierra que le echaban, al pasar las horas, se dieron cuenta que cada sacudida aumentaba el nivel del piso y el burro se aproximaba cada vez más hacia la salida, la jornada continuo y cada pala de tierra que sacudía el burro, caía al suelo, hasta que finalmente el burro logro salir después de tantas sacudidas, así que el consejo que te doy.- ¡Sacúdete! .- Ahora junto y junto mensajes, con la diferencia de que también archivo y reenvío un buen número de mensajes que me llegan. Los guardo y los comparto, como el siguiente texto de Joseph Newton:


El Principio del Vacío:


¿Tienes el hábito de juntar objetos inútiles, creyendo que algún día (No sabes cuándo)  podrás precisar de ellos? ¿Tienes el hábito de juntar dinero, sólo para no gastarlo, pues piensas que en el futuro podría hacerte falta? ¿Tienes el hábito de guardar ropa, juguetes, zapatos, muebles, utensilios domésticos, cuchillos de plata, vajillas y otras cosas que ya no usas desde hace bastante tiempo? Y dentro de ti, ¿tienes el hábito de guardar lo que sientes, broncas, resentimientos, miedos, frustración, envidia, inseguridad, duda, complejos, culpa, dolor, arrepentimiento, ira, odio, sed de venganza, conmiseración, reproches, quejas, insatisfacciones, decepciones, depresiones, tristezas, guardas rencores   de todo y por nada, celos, insatisfacciones, infidelidades, mentiras?…… 


NO HAGAS ESO….

 

Es anti-PROSPERIDAD, es preciso hacer un espacio, para que las cosas nuevas y buenas lleguen a tu vida. Es preciso eliminar lo que es inútil en ti y en  tu vida, para que la prosperidad llegue. Es la fuerza de ese vacío que absorberá y atraerá todo lo que desees. Mientras estés, material o emocionalmente cargado de cosas viejas, no habrá espacio para nuevas oportunidades. Sertalina.

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