*Esta enfermedad ocurre, principalmente, en las personas que fuman o están expuestas al humo del tabaco.
*El Instituto otorga atención multidisciplinaria para la atención del paciente.
El cáncer de pulmón se ubica entre las primeras causas de muerte en el país, por lo que su diagnóstico temprano y tratamiento adecuado son fundamentales para evitar la enfermedad, indicó el médico neumólogo, del Hospital General Regional (HGR) No. 1 “Vicente Guerrero”, Hugo Arancibia Vargas.
En el Día Internacional de la Lucha contra el Cáncer de Pulmón, el especialista del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Guerrero explicó que la mayoría de los casos para desarrollar cáncer de pulmón están relacionados con: fumar, seguido de la exposición al humo de tabaco de segunda mano, el humo de leña y combustibles.
Los síntomas, dijo, varían, entre ellos: tos seca o con flemas, sangrado, sibilancia (sonido silbante y chillón durante la respiración), cambio de voz (disfonía), problemas para la deglución (en casos severos), baja de peso y, en algunos casos, fiebre, dolor torácico o disnea o falta de aire.
Arancibia Vargas reiteró que un diagnóstico preciso y oportuno pueden ayudar a salvar la vida del paciente, ya que existe la posibilidad de recurrir a tratamientos que puedan ser eficaces, menos invasivos y mucho más seguros.
Explicó que la población debe tomar conciencia de que la prevención otorga salud, advirtiendo que la medida preventiva más importante para evitar el cáncer de pulmón es abandonar el hábito de fumar.
El especialista comentó que el tratamiento de un paciente dependerá de lo que el médico oncólogo considere adecuado de acuerdo con el grado de enfermedad del paciente, ya sea con quimio o radio terapia.
“El área de Neumología hace el diagnóstico o el médico oncólogo decide el tratamiento que se otorgará de acuerdo con los síntomas o invasión de la enfermedad que tenga el paciente”.
Finalmente, recomendó evitar malos hábitos como fumar y estar expuestos al humo del tabaco, además de lograr una mejor calidad de vida, donde prevalezca una alimentación sana, realizar algún tipo de actividad física y bajar los niveles de estrés, así como realizar visitas al médico familiar al menos dos veces por año, aun y cuando no se sientan enfermos.
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