LA VERDAD DE LA CAÍDA DE PEDRO CASTILLO

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Por Tulio Fernando landazuri Rodríguez; Periodista de investigación Perú y conductor del programa periodista sin censura

Pedro Castillo fue, hasta antes de subir al poder máximo del Estado peruano, un dirigente rural del profesorado en el Perú. Postuló en las últimas elecciones presidenciales del 2021, aunque como candidato nunca apareció en las encuestas como futuro presidenciable y mucho menos entre los favoritos. Los círculos políticos, y los referidos a medios de comunicación más selectos que nos podamos inmaginar, nunca estimaron ni vieron en sombra la llegada de un profesor al poder. En esta contienda electoral, Pedro Castillo logra obtener el poder al ganarle a Keiko Fujimori, la hija de otrora presidente del Perú, Alberto Fujimori, quien terminó encarcelado por corrupción.

El 28 de julio del 2021 Pedro Castillo asumió el poder así tal cual. Hubo un clase política pasmada con un círculo mediático sorprendido y en el cual, inmediatamente tras su ascenso al poder, empezaron con la estrategia del fraude; así sonaban en el país los tambores de guerra, inmeditamente juramentado, Pedro Castillo aún no se sentaba en el trono, alzado como un rey emanado del pueblo, cuando empezaban los puyasos por parte del congreso, desde ese dia no sesó el intenso asedio político donde el sueño de ser presidente se convirtiera en una pesadilla política sacada de ultratumba.

Dentro del gobierno de Pedro Castillo desfilaron 59 ministros tal cual fuera un desfile de moda para todos los gustos,  iniciando el primer consejo de ministros liderado por el congresista Guido Bellido, un tipo que despedía un olor a irreverencia con estilo acriollado. Ya casi para el final de sus días como presidente, Castillo designa a Aníbal Torres como titular de la Presidencia del Consejo de Ministros, un gabinete marcado por la irreverencia y la política contestataria. Su último gabinete llamado «el gabinete Titanic», llamado así como la película porque fue el que permitió la precipitación de quien entonces ostentaba la presidencia, estuvo dirigido por quien le juro lealtad incondicional, Betssy Chávez Chino; siempre hasta su último momento fue confrontacional al Congreso de la República,  que fue como su vitamina para esta estirpe política, la confrontación.

Ese 7 de diciembre del 2022 nadie esperaba un discurso presidencial y mucho menos en ese día nublado que una palabra olvidada por más de dos décadas se volviera a escuchar: nos referimos a la palabra DISOLVER con la cual Pedro Castillo dió la lectura,  tembloroso y asustado, como si fuera un niño esperando su castigo o un cordero rumbo al matadero. Medio Perú se paralizó. No podían creerlo, que alguien intentara adelantar a una jugada política , tal cual fuese una jugada de ajedrez más por impulso más no razonada. Ese discurso de 7 de diciembre del 2022 retumbó en el régimen, el cual como en un castillo de naipes que cae, iban renunciando o cayendo uno a uno sus ministros. Castillo, mientras no tenía el apoyo de FF.AA, al trancurrir las horas se iba quedando solo. Su amigo y expremier Aníbal Torres, como aquel perro fiel a su amo, está con él hasta el último, hasta que decidío salir de palacio de gobierno con su Guardia Pletoriana rumbo a buscar una protección "azteca"; sin embargo, su misma guardia pletoriana terminó siendo su carcelera. No le permitieron llegar a su única opción de liberarse de esa pesadilla y pasar al sueño mexicano, país que había decidido darle asilo, mucho menos fue  un golpe de estado; pero no había armas, no había soldados en las calles, otros decían sedición, pero como dicen los peruanos; ni chicha ni limonada.

Lo que si apega a la verdad es que Castillo no estaba haciendo un buen gobierno, no tenía conocimiento de nada, actuaba como niño con su juguete nuevo y que, a pesar de los escándalos permaneció bajo el manto de la inocencia e inmadurez infantil. Pedro Castillo hasta el momento de su detención era presidente y gozaba de inmunidad. Nos preguntamos ¿por qué lo detuvieron?, ¿por qué luego el congreso trató de parchar el hueco legal con el retiro de la inmunidad, que era tardío? todo llegó en un ambiente enrarecido y aires contaminados con la traición. Su Guardia Pletoriana no lo defendió.  Debió hacerlo, pero no lo hizo y fue entregado a sus captores. Hoy enfrentará muchos cargos, pero México logró sacar a su familia tras un asilo político, dejando una estela de conflicto diplomático. La pregunta que cae por su propio peso es: ¿Es tan difícil para Dina Boluarte convocar a elecciones o es más fácil atornillarse al poder?