EL GENIO
Como hoy no logré que me funcionara el cerebro, recurro a contarles un chiste medio mamuco con la advertencia de que si está mucho, no me culpen sino a Daniel que me lo envió por Internet:
Un tipo va caminando por la calle, cuando se tropieza con una lámpara, la levanta y al quitarle el polvo, se aparece un genio saliendo de ella…
“… Como eso de los tres deseos está muy choteado, te voy a conceder solamente uno por haberme liberado…” --le dice el genio—
Aquel piensa detenidamente y le dice: siempre quise ir a Europa, pero me da miedo el avión y el barco, ¿podrías construir un puente de México a Londres…?
El genio protesta: ¿te imaginas la cantidad de acero, la cantidad de cemento? ¿Los pilotes hasta el fondo del mar para sostenerlo? ¿Sabes que serían miles de kilómetros? ¿Estás loco?, piensa en otro deseo…
El hombre piensa y le pide: “…quiero entender a las mujeres…”
Quiero saber por qué a veces ríen, por qué a veces lloran… por qué a veces nos aman y a veces nos odian… quiero estar seguro de acertar cuando dicen sí queriendo decir que sí y cuando dicen que sí queriendo decir que nó… quiero saber qué piensan cuando te dicen que tengas quietas las manos queriendo en realidad que las acaricies más… En pocas palabras: ¡Quiero entenderlas, genio…!
A ver, dice el genio, eso de entender a las mujeres, déjame pensar… mejor concrétame: ¿la carretera aquella la quieres de dos o de cuatro carriles…?
Es todo. héctor garcía alvarez
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