TERCERA VÍA

 “Jacko”, los abusos de la ambición

Ernesto Rivera Rodríguez

El Congreso del Estado se encuentra en los más absurdos de los juegos del poder, de los mareos que produce esa minúscula tasa de poder qué significa ser diputado o representante social, a tal grado que en la anterior legislatura, la LXII y la presente, resolver él porqué son lo qué supuestamente son, se resuelven en base a disputas de vecindad, de colegiales empecinados en lograr sus ambiciones y cómo es el caso qué nos ocupa en un patológico berrinche, producto de una pervertida militancia.

No tiene ninguna ciencia política entender la absurda conducta del diputado Joaquín Badillo Escamilla, alias “Jacko”, o “pargo” cuyas actitudes han rebasado las líneas de la cordura y la razón; más qué político ha mostrado una insaciable sed de poder, una ambición patológica cómo lo ha mostrado en su papel ante la gobernadora y su progenitor, una sumisión que le ha permitido que le arrojen unas monedas de poder a su paso; “mileniari” como muchos de esta camada morenista, qué han usado la política, como mercancía de uso.

La cosificación total de la política.

La partitura actual se deriva del cambio de la presidencia de la Mesa Directiva de la LXIII Legislatura, la cual debe rotar cada año, a una fracción diferente a la

 mayoritaria en poder de la Jucopo, en manos del glamour y la vanidad (tiene con qué) de la diputada de Morena Yoloksin Domínguez Serna.

En una jugada sacada de la manga el diputado Joaquín Badillo Escamilla, da a conocer que deja el partido Morena, así sin más explicación y convertirse en independiente. (Tal ves alguien 

le canto al oído). Un elemento más en esta pésima puesta en escena política, y anterior a ello era su ambición por lograr la candidatura a la alcaldía de Acapulco, que viene abonando desde hace meses. La que de tajo queda eliminada al dejar la bancada morenista. Aun así el gran adorador felixista asume equivocadamente que con ese movimiento puede continuar sin daño alguno su proyecto.

Pero el destino o la realidad que a veces nos parece absurda, mete las manos y lo “voluble del carácter” del diputado emerge desde lo más profundo de su ser y su mecha corta, “cortisima” irrumpió en contra del reportero Francisco Cárdenas; las demandas ante la Fiscalía General del estado y la Comisión Estatal de los Derechos Humanos en Guerrero, en contra del diputado, por supuestas amenazas no se hicieron esperar y están en curso.

En tanto ya en dos ocasiones su candidatura a la presidencia de la Mesa Directiva del Congreso Local, ha sido negativa, rechazada al pretender lograrla con una supuesta afiliación fast tract a la fracción del PVEM, partido que hace tiempo lo denunció por pescar tiburones, qué el mismo público, y cuya supuesta afiliación es muy dudosa.

Su descaro después de supuestamente participar en un fraude de enormes dimensiones como socio de dos altos ejecutivos del gabinete de Evelyn al, se afirma en la compra de terrenos en la zona del Pedregoso dónde se construiría el Hospital del ISSSSTE, que fue descubierto y dado a conocer al presidente AMLO, quién en automático canceló el proyecto el pasado 22 de julio del 2022. Hoy desde la tribuna del Congreso subió de tono a un pervertido berrinche, al anunciar qué sí no le dan la presidencia, antes del 19 de Julio se regresa a Morena. Cómo dice el dicho “Dios No concede antojos, ni endereza jorobados”. Qué alguien le diga qué en este mundo nadie es imprescindible.

Todo ello No es más qué el resultado de la forma tan negligente y hasta de corruptelas que el partido Morena en las dos legislaturas ha logrado la mayoría, es trabajar de acuerdo a ocurrencias, enterrar fraudes financieros en contra del mismo Congreso, por un diputado indígena que no es indígena, y otro usurpador de la curul perteneciente a la LGTBB y además es presidente del partido Morena desde su clóset; un Congreso hoy metido en un tinglado de lavadero, en lugar de aplicar las leyes y reglamentos que le dan vigencia y orden, la cosificación total de la política. 

Ante todo esto No cabe duda qué la fracción priista con el diputado Héctor Apreza Patrón al frente, desde las gradas atienden con preocupación el tinglado de lavandería en qué están metidos los morenos. Y no es para menos.