Los frutos del diplomático espíritu cooperante
“La energía del multilateralismo es una clarividencia versátil, nos recuerda el estímulo inspirador, de que juntos somos más fuertes. Teniendo esto presente, la claridad es manifiesta, lo que requiere un cambio de dirección y de sentido en nuestro paseo existencial”.
Víctor CORCOBA HERRERO/ Escritor
corcoba@telefonica.net
Todo hay que trabajarlo en comunión y en comunidad, con un nuevo estilo cooperante entre al menos tres Estados, sin obviar el buen talante inteligente, lo que facilitará el entendimiento inclusivo y el brío solidario. Desde luego, el marco multilateral por excelencia hoy en día, se sustenta en la Carta de las Naciones Unidas, que no se limita a definir únicamente la estructura, la misión y el funcionamiento de la Organización, sino que también continúa siendo el horizonte de la estética, para promover el espíritu armónico, respetando la dignidad de cada persona, defendiendo a su vez los pilares del Estado de derecho y advirtiendo sobre el cumplimiento de los derechos humanos. Sin duda, la unidad de nuestros pueblos está en repoblarse de pulsos y, además, en poblarse de conciencia.