Crear entusiasmo y reafirmar lazos
“Todos estamos llamados a extender los brazos en la cotidianidad de cada jornada y a la búsqueda de valores comunes, con su dinamismo y fervor espiritual, contribuyendo a revitalizar el hermanamiento y a practicar la hospitalidad, conscientes de que, trabajando en plena donación, encontraremos sentido a nuestra existencia”.
Víctor CORCOBA HERRERO/ Escritor
corcoba@telefonica.net
Es necesario elevarse con las alas del buen ánimo, máxime en un momento marcado por la polarización política y el aislamiento social; sin embargo, solemos proceder en nuestro diario vivencial, como si la ostentación y la riqueza fueran lo más importante en la vida, cuando lo único que precisamos para estar realmente satisfechos es algo por el cual entusiasmarnos, sabiendo que toda contribución es vital para todo tipo de avances humanitarios. En consecuencia, tampoco perdamos el tiempo en necedades que nos contraigan el alma y en lugar de abrir sus puertas, las cerremos por el cansancio, el dolor y la desilusión. No olvidemos que, cada aurora, es un nuevo florecer y la esperanza debe ser lo último que perdamos.